Atlanta, GA. — Lo imposible se hizo realidad en el Truist Park este jueves, cuando los Arizona Diamondbacks remontaron un déficit de seis carreras en el noveno inning para vencer 11-10 a los Atlanta Braves, completando una barrida histórica en la serie de tres juegos.
Abajo 10-4 con un out en el noveno episodio y con una probabilidad de victoria de apenas 0.1%, los D-backs desataron una ofensiva imparable que incluyó siete carreras en cadena y un doblete remolcador de dos carreras del venezolano Eugenio Suárez, quien selló la remontada tras haberse ponchado para abrir la entrada.
“Este juego no termina hasta que se sacan los 27 outs”, afirmó Suárez. “Fuimos paso a paso. Nunca nos rendimos”.
La reacción comenzó con un jonrón solitario del cubano Lourdes Gurriel Jr., seguido por una base por bolas a Tim Tawa y un cuadrangular de dos carreras de Alek Thomas. Luego llegaron las contribuciones clave del venezolano José Herrera (BB), Corbin Carroll (doble), el dominicano Ketel Marte (sencillo productor), Ildemaro Vargas (sencillo) y finalmente, el doblete decisivo de Suárez para completar una de las remontadas más improbables de la historia reciente.
Dato histórico: Antes de esta victoria, los D-backs tenían un récord de 0-419 cuando estaban perdiendo por seis o más carreras después de ocho entradas. Asimismo, los Braves no perdían un juego con una ventaja de seis carreras entrando al noveno inning desde 1973, rompiendo una racha de 766 victorias consecutivas en esas condiciones.
“Este equipo es dinámico”, dijo el mánager Torey Lovullo. “Nunca sabemos cuándo va a comenzar la remontada, pero confiamos en que puede llegar en cualquier momento”.
La remontada se gestó ante el relevo de Scott Blewett y el cerrador cubano Raisel Iglesias, quienes no pudieron frenar el empuje de unos D-backs encendidos ofensivamente y con la moral por las nubes.
Con esta victoria, Arizona extendió su racha ganadora a cuatro juegos consecutivos, con un impulso emocional que podría marcar el rumbo de su temporada.