
Santo Domingo, RD.- Uno de los imputados por su implicación en la red desmantelada este martes por la Procuraduría General de la República, en allanamientos realizados en el Distrito Nacional y en Santiago, se vio obligado a pagar sobornos como una forma de recibir el desembolso de cheques por servicios de seguridad prestados en instituciones públicas.
El abogado Carlos Balcácer reveló esta información en referencia a su cliente Quilvio Rodríguez, quien se encuentra entre los catorce detenidos en la Operación Lobo. Esta operación fue desarticulada mediante 15 allanamientos realizados como parte de una investigación iniciada a partir de una denuncia de la Dirección de Integridad Ética.
De acuerdo con el jurista, su cliente ha documentado todo y ha colaborado con la investigación emprendida por el Ministerio Público.
Denunció que su defendido se vio obligado a erogar más de 700 mil pesos al mes cada vez que recibía el pago de cheques por cinco, seis y siete millones de pesos. "Un grupito de sinvergüenzas que deben admitir todos los hechos", agregó.
Indicó que Rodríguez estuvo involucrado en ese sistema de sobornos durante un periodo de ocho años, presuntamente "pagando para que le pagaran por sus servicios".
Entre los detenidos se encuentran coroneles en activo y generales retirados, según informaciones preliminares.
La estructura delictiva para el cobro de sobornos, destinada a facilitar y asegurar contratos de seguridad privada, operaba en el Instituto Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia (Inaipi), el Seguro Nacional de Salud (Senasa), la Empresa Distribuidora de Electricidad del Norte (EdeNorte), la Empresa Distribuidora de Electricidad del Este (EdeEste) y la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur (EdeSur).
En 15 allanamientos participaron 36 fiscales y 189 miembros de la Policía Nacional.