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La crisis financiera de la empresa norteamericana New Fortress Energy (NFE) podría afectar la entrada en operación de la planta energética que se construye en Manzanillo, al norte de la República Dominicana y con la cual confía el gobierno que preside Luis Abinader conjurar parte del déficit del país.
La preocupación sobre el futuro de la planta energética ENERGÍA 2000, en construcción en Manzanillo, Montecristi, se produce dado que su abastecimiento de gas natural licuado (GNL) depende directamente del suministro de la empresa estadounidense.
La planta ENERGÍA 2000 tiene firmado un contrato con NFE para el uso del buque regasificador Energos Freeze, con capacidad de 125,000 m³, por tres años a partir de septiembre de 2025 en el puerto de Pepillo Salcedo. Cualquier incumplimiento de NFE comprometería la entrada en operación y sostenibilidad energética del proyecto, considerado estratégico para diversificar la matriz eléctrica nacional.
NFE acumula deudas superiores a US$8,900 millones y reportó pérdidas operativas de US$197 millones solo en el primer trimestre de 2025. Además, recibió un aviso de incumplimiento por parte del Nasdaq debido a retrasos en la presentación de reportes financieros.
En Puerto Rico, la empresa suspendió el envío de GNL por una deuda en disputa de US$9 millones con la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), lo que dejó sin servicio a siete unidades de emergencia y amenaza con cortes eléctricos en plena temporada de alta demanda.
El zar de Energía de Puerto Rico, Josué Colón, calificó como inaceptable la suspensión del servicio. «La negativa deliberada de su empresa a cumplir con sus obligaciones ya ha provocado una escasez de energía evitable que amenaza la salud y la seguridad pública», afirmó en una carta a Wes Edens, CEO de NFE.
Actualmente, diez unidades generadoras en San Juan y Palo Seco están fuera de servicio por la falta de gas natural. Aunque algunas pueden operar con diésel, Colón advierte que esto incrementa los costos y reduce la confiabilidad.
La Junta de Supervisión y Administración Financiera de Puerto Rico rechazó un contrato propuesto de US$20,000 millonesentre Genera PR (subsidiaria de NFE) y la unidad de distribución de gas de la compañía, señalando que crearía un arreglo monopolístico que pondría en riesgo la seguridad energética de la isla.
Entre las preocupaciones destacan:
La junta recomendó extender el acuerdo actual como medida temporal para garantizar la continuidad del servicio mientras se negocia un contrato más equilibrado.
Si la crisis de NFE se profundiza y la empresa entra en incumplimiento, ENERGÍA 2000 enfrentaría retrasos operativos, aumento en los costos del suministro y posibles impactos en la tarifa eléctrica nacional, complicando los planes de diversificación energética de República Dominicana.
Apenas en el día de ayer anunciaba el gobierno la llegada al puerto de Manzanillo la llegada del buque Energos Freeze a la terminal de importación de gas naturallicuado (GNL) de Energía 2000, ubicada en la Bahía de Manzanillo, provincia Monte Cristi.
El Energos Freeze es una unidad flotante de almacenamiento y regasificación (FSRU) que jugará un rol clave en el suministro de gas natural al proyecto energético Manzanillo Power Land, una central a ciclo combinado que está en su fase final de construcción.
