
Jerusalén.- La población de Gaza se está muriendo de hambre, y entre ellos hay un millón de niños gazatíes, denunció este domingo la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), que urgió a Israel a terminar con el bloqueo de suministros que perdura desde hace cuatro meses y medio.
«Las autoridades israelíes están matando de hambre a los civiles en Gaza. Entre ellos hay un millón de niños. Levantad el asedio: permitid que la UNRWA traiga alimentos y medicinas», instó la agencia en un comunicado en X.
La agencia asegura disponer de alimentos suficientes al otro lado de la divisoria, para alimentar a los 2,1 millones de gazatíes durante más de tres meses.
Sin embargo, Israel apenas permite la entrada de camiones desde el 2 de marzo -los pocos que lo logran casi siempre llevan harina y la mayoría son saqueados-, y a finales de mayo puso en funcionamiento un sistema basado en centros de distribución militarizados, cerca de los cuales ya han muerto más de 900 palestinos, según Sanidad.
La falta de alimento en Gaza -desde harina, alubias a cualquier producto fresco- es ya tan extrema que, ayer sábado, la ONG basada en EE.UU, Rahma Worldwide, alertó también de que más de un millón de palestinos están en riesgo de morir de hambre.
De acuerdo con un doctor en el Hospital sureño de Naser, algunas familias están recurriendo al uso de agua con sal a fin de intentar calmar los estómagos hambrientos de sus hijos. Cada vez más personas llegan con signos de desmayo y exhaustos a emergencias.