
Las hijas del presidente Luis Abinader y de la primera dama Raquel Arbaje ya se encuentran en el Congreso Nacional para participar en el acto de toma de posesión.
Su presencia coincide con un fuerte gesto de compromiso cívico: la firma de una Carta Abierta dirigida al Congreso, en la que más de mil ciudadanos y ciudadanas —incluyendo destacadas figuras políticas, activistas y profesionales— denuncian los retrocesos que implica la actual versión del nuevo Código Penal en materia de derechos humanos.
El documento, suscrito por la primera dama y sus hijas, así como por miembros del oficialista Partido Revolucionario Moderno (PRM), pone en evidencia que la preocupación por los aspectos regresivos de la reforma penal, especialmente en lo relativo a los derechos de mujeres y niñas, trasciende líneas partidarias y convoca un consenso amplio en defensa de las garantías fundamentales.
