
La ola de calor que sacude a España, con temperaturas superiores a los 40 grados en varias zonas del país, complica la lucha contra los incendios que permanecen activos y que han arrasado en conjunto más de mil hectáreas.
Uno de las incendios más graves se ha registrado en la localidad gallega de Chandrexa de Queixa (Ourense, donde se intentan poner «todos los medios» para que el fuego no entre en la Serra do Invernadoiro tras haber afectado ya a 800 hectáreas, principalmente de monte raso.
El presidente del gobierno gallego, Alfonso Rueda, ha recordado este domingo que «en la inmensa mayoría» de los incendios forestales está detrás «la mano» de quien los provoca y ha pedido responsabilidad.
Rueda ha señalado que las «altas temperaturas dificultan las tareas de extinción» de los fuegos que afectan a Galicia y «son más propicias» para que se produzcan nuevos focos.
En Navarra, los bomberos no han logrado extinguir el fuego declarado en el paraje de Carcastillo, que enfrenta «circunstancias complicadas» por las altas temperaturas, aunque «no hay riesgo para la población», según la administración local.
León vive un fin de semana negro en el que se han registrado cinco incendios en distintas zonas de la provincia, varios en la comarca de El Bierzo.