
Santo Domingo. — La exministra de la Mujer y dirigente política, Janet Camilo, desató una ola de reacciones al emitir fuertes críticas sobre la más reciente edición del Miss República Dominicana Universo 2025, asegurando que el certamen ha perdido conexión con la diversidad y los estándares tradicionales de belleza del país.
Durante su participación en el programa "Marcando el Rumbo", transmitido por CDN Radio, Camilo calificó como "decepcionante" el grupo de candidatas y fue más allá al afirmar que “se eligió un grupo de muchachas de las más feas del país”, expresión que generó controversia inmediata en redes sociales y medios.
Camilo sostuvo que ninguna de las participantes, incluida la ganadora, proyecta lo que históricamente se ha considerado la belleza dominicana.
“Ni la que ganó puede considerarse una verdadera representante del país”, sentenció.
Entre sus principales observaciones, cuestionó el uso excesivo de maquillaje y cirugías, al tiempo que lamentó la falta de representación de mujeres con cabellos y tonos de piel diversos. “Uno recorre el país y ve jóvenes hermosas, naturales, que no vimos reflejadas en el certamen”, apuntó.
También criticó el perfil físico de algunas concursantes, especialmente en lo que respecta a la estatura, un aspecto que —según ella— suele ser determinante en competencias internacionales como Miss Universo.
¿Desinterés o mala gestión?
Camilo planteó que este aparente desajuste podría obedecer a una falta de interés de las jóvenes en participar, al descrédito progresivo del certamen o a fallos en el proceso de selección de candidatas. “Es momento de revisar los criterios con urgencia”, insistió, dirigiéndose a la organización del concurso, liderada por Magali Febles.
Recordó con nostalgia la participación de reinas como Amelia Vega (Miss Universo 2003) y Celinee Santos, quienes —a su juicio— sí representaban con orgullo la identidad dominicana en escenarios internacionales.
Reacciones profesionales
Las declaraciones de Camilo no pasaron desapercibidas. Uno de los primeros en responder fue el psicólogo Juan Rojas, quien ha colaborado con la organización de Miss Universo, y quien abordó la polémica desde una perspectiva ética y profesional, instando a un análisis más respetuoso hacia las participantes y al impacto emocional que pueden generar este tipo de señalamientos públicos.