Francia reconoce en la ONU al Estado de Palestina

El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este lunes el reconocimiento oficial del Estado palestino durante la “Conferencia por la solución de dos Estados”, organizada por Francia y Arabia Saudita, cumpliendo así su promesa previa.

“Este reconocimiento reafirma que el pueblo palestino no es un pueblo de más, sino uno que conserva con orgullo su historia, sus raíces y su dignidad”, afirmó Macron. Al mismo tiempo, subrayó que “reconocer los derechos legítimos del pueblo palestino no disminuye en nada los derechos del pueblo israelí, al que Francia ha apoyado desde el primer día”.

El mandatario francés aseguró que este reconocimiento “es la única vía para alcanzar la paz en Israel” y constituye “una derrota para Hamás y para quienes promueven el odio antisemita y la destrucción del Estado de Israel”.

La medida se produce un día después de que Australia, Portugal, Canadá y Reino Unido reconocieran también a Palestina como Estado, en lo que se considera una jornada histórica para la causa palestina. Sin embargo, varios países europeos como Alemania, Italia, Países Bajos, Grecia, Austria y Finlandia aún no lo han hecho, evidenciando la división en el continente sobre la solución de dos Estados.

Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres, señaló en la conferencia que la creación del Estado palestino “es un derecho, no una recompensa”. Guterres cuestionó a quienes se oponen a la solución de dos Estados y advirtió que sin ella “no habrá paz en Medio Oriente, y el radicalismo se expandirá por todo el mundo”.

Hasta ahora, más de 150 países miembros de la ONU reconocen al Estado palestino, incluyendo casi todos los países de América Latina y África, y ahora también una parte significativa de Europa.

En contraste, el embajador israelí ante la ONU, Danny Danon, calificó la conferencia de “teatro” y aseguró que los anuncios “no cambiarán la vida de los palestinos sobre el terreno”. Mientras Danon ofrecía estas declaraciones, Israel continuaba con una ofensiva terrestre en Gaza y ampliaba sus asentamientos en Cisjordania ocupada, acciones consideradas ilegales según el derecho internacional.