Exesposo de Britney Spears revela detalles íntimos de su primera noche con la cantante y desata revuelo

El exmarido de Britney Spears, Kevin Federline, volvió a encender la polémica al revelar explícitos detalles de su primer encuentro sexual con la cantante, relato incluido en su próximo libro de memorias y que ha provocado una airada respuesta de la intérprete de Toxic.

Federline contó que, aunque ya formaba parte del equipo de baile de Spears durante su gira del año 2000, no habían tenido trato personal hasta aquella noche en la que, según describe, “todo lo demás desapareció, y solo quedamos ella y yo”.

Relata que la atracción fue inmediata y que Spears lo invitó al bungalow que ocupaba en el Beverly Hills Hotel. Allí, según su versión, la cantante tomó la iniciativa y el encuentro se tornó puramente físico. “Britney salió del jacuzzi, me tomó del brazo y me llevó al bungalow. Los demás entendieron el mensaje y se fueron”, escribió. Agrega que esa primera noche se convirtió en una relación que se extendió durante varios días.

Pese a que Federline asegura que en ese momento no imaginaba un futuro con ella, pocos meses después la artista lo invitó a unirse a su gira europea Onyx Hotel Tour. La conexión entre ambos creció rápidamente y en 2004 se casaron. De esa unión nacieron sus hijos Sean Preston y Jayden James, hoy adolescentes. El matrimonio terminó en 2007, marcado por tensiones mediáticas y disputas personales.

Las confesiones del exbailarín contrastan con lo escrito por Spears en sus propias memorias The Woman in Me (2023), donde admitió que su relación comenzó con una fuerte atracción, pero insistió en que para ella significó algo mucho más íntimo que una simple aventura.

La publicación del libro de Federline desató la indignación de la cantante, quien lo acusó públicamente en la red X (antes Twitter) de intentar humillarla y lucrar con su historia personal.

“Si realmente amas a alguien, no lo ayudas humillándolo. Ese hombre me odia, y es un odio profundo para decir las cosas que está diciendo”, expresó Spears, asegurando que se siente profundamente herida por las nuevas revelaciones.

El enfrentamiento revive viejas heridas entre la expareja y reabre el debate sobre los límites de la privacidad y el respeto en la era de las memorias mediáticas.