China redefine su rumbo económico en medio de la desaceleración y las tensiones comerciales

Pekín, China.– El Partido Comunista Chino (PCCh) inició este lunes una reunión a puerta cerrada del Comité Central, un encuentro clave en el que se trazará la estrategia económica del país para los próximos años, en un contexto marcado por la desaceleración del crecimiento, la debilidad del consumo interno y el impacto de la guerra comercial con Estados Unidos.

El pleno, presidido por el presidente Xi Jinping, reúne a los 200 miembros titulares y 170 suplentes del Comité Central en el Gran Salón del Pueblo, en la plaza de Tiananmén. Esta cita, la cuarta durante el actual mandato (2022-2027), centrará su agenda en el diseño del 15.º plan quinquenal de desarrollo económico y social, que abarcará el periodo 2026-2030.

Según la prensa estatal, el nuevo plan servirá como hoja de ruta para consolidar tres grandes metas del liderazgo de Xi: la autosuficiencia tecnológica, el fortalecimiento del poderío militar y la estabilidad económica. El documento final, que resumirá las decisiones adoptadas, será publicado el jueves y ratificado oficialmente por la legislatura en marzo.

La reunión se celebra en un momento de incertidumbre. China enfrenta un prolongado estancamiento en el sector inmobiliario, una caída del consumo y tensiones con sus principales socios comerciales. Los analistas prevén que el crecimiento del PIB entre julio y septiembre se haya desacelerado a un 4,8%, el ritmo más bajo en un año.

Expertos como Teeuwe Mevissen, economista de Rabobank, advierten que aunque estos plenos suelen atraer menos atención internacional, las decisiones económicas de China tienen repercusiones globales.

Entre los temas más sensibles del debate figura la sobrecapacidad industrial, que genera excedentes de productos baratos y agrava los roces comerciales con Occidente. También se esperan movimientos internos, como la destitución formal de Tang Renjian, exministro de Agricultura, condenado por corrupción.

Con este encuentro, el liderazgo de Xi busca reafirmar el control político y económico del país, ajustando su modelo de crecimiento ante un escenario global cada vez más desafiante.