
El primer ministro Andrew Holness, declaró al país como "zona catastrófica", tras el impacto del huracán Melissa de categoría 5 que disminuyó a 4, horas después de tocar tierra en Westmoreland, localidad ubicada en el suroeste de la isla.
La declaración se realizó en virtud de la Ley de Gestión del Riesgo de Desastres, según un comunicado de la oficina del primer ministro.
De acuerdo a los datos proporcionados por la Compañía de Servicios Públicos de Jamaica, más de 530.000 clientes, alrededor del 77 %, se encuentran sin servicio eléctrico en el país.
Por su parte, Desmond McKenzie, el ministro jamaicano de Desarrollo Comunitario y responsable de la respuesta ante desastres, lamentó en una rueda de prensa que se reportaron inundaciones generalizadas, deslizamientos de tierra y graves daños en las infraestructuras en los municipios Clarendon, Manchester, Saint Elizabeth y Westmoreland.
Asimismo, anunciaron que Melissa provocó daños en seis hospitales.
De acuerdo al Centro Nacional de Huracanes, Melissa disminuyó a categoría 4, aunque las alertas por fuertes vientos, inundaciones repentinas y marejada ciclónica persisten.