
Kilmar Ábrego García, inmigrante salvadoreño residente en Maryland, fue liberado de manera inmediata por orden de una jueza federal, quien consideró que su detención por parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) carece de fundamento legal.
La magistrada Paula Xinis subrayó que, tras ser deportado por error a El Salvador en marzo y luego regresado por mandato judicial, Abrego García permanecía detenido sin autorización válida, convirtiendo su caso en un símbolo de los conflictos sobre la política migratoria de la administración Trump.
El Departamento de Seguridad Nacional calificó la decisión como “activismo judicial descarado” y anunció que recurrirá el fallo, mientras Abrego García, casado y padre de un hijo estadounidense, busca reabrir su caso de inmigración para solicitar asilo.
Además, enfrenta cargos penales por tráfico de personas en Tennessee, que su defensa considera “retaliatorios” por la atención mediática y judicial que su deportación indebida generó.
La jueza Xinis también denunció que ICE presentó información falsa sobre la aceptación de Costa Rica para recibirlo, destacando las irregularidades en la gestión del caso y reforzando su argumento de liberación inmediata.