
El Senado de la República aprobó este martes, mediante un trámite de urgencia y en dos lecturas consecutivas, el proyecto de Ley de Presupuesto General del Estado para 2026, con un monto de 1.34 billones de pesos y sin aplicar la indexación salarial prevista en el Código Tributario.
La decisión, que replica la ruta seguida la semana pasada por la Cámara de Diputados, reavivó el debate político y las críticas de la oposición, al dejar por séptimo año seguido sin efecto el ajuste salarial por inflación.
Desde la oposición, el senador Eduard Espíritusanto, de la Fuerza del Pueblo por La Romana, cuestionó la orientación del gasto público y acusó al Gobierno de privilegiar el gasto corriente en detrimento de la inversión productiva.
A su juicio, el presupuesto aprobado evidencia una visión económica que compromete el crecimiento y limita el impacto del gasto público en el desarrollo.
En el mismo tono, el senador Omar Fernández, representante del Distrito Nacional, propuso devolver el proyecto a comisión para abrir un proceso de consenso que permitiera suprimir el artículo 45, mediante el cual se suspende la indexación salarial. La moción, sin embargo, fue rechazada por la mayoría del pleno.
Fernández subrayó que la indexación salarial es una obligación legal incumplida desde 2017 y advirtió sobre sus efectos directos en los trabajadores.
Explicó que, al no actualizarse el umbral del impuesto sobre la renta, los asalariados comienzan a tributar desde ingresos mensuales de 34,685 pesos, cuando la ley establece que debería ser a partir de unos 52,000 pesos, una brecha que impacta de forma directa el poder adquisitivo de las familias.
El oficialismo defendió la iniciativa argumentando su impacto en las provincias.
Los senadores Antonio Marte y Cristóbal Venerado Castillo destacaron las obras y proyectos incluidos para sus demarcaciones, mientras que Aneudy Ortiz aseguró que rechazar el presupuesto habría significado frenar el desarrollo, al citar inversiones en acueductos e infraestructura para San José de Ocoa.
El presidente del Senado, Ricardo de los Santos, respondió a las críticas recordando que la última indexación salarial se aplicó en 2016, antes de la llegada del actual Gobierno.
Además, defendió la gestión fiscal al resaltar la reducción de la deuda pública en relación con el PIB, que pasó de 56.6 % en 2020 a 46.9 % en la actualidad.
El Presupuesto General del Estado para 2026 proyecta ingresos por 1.34 billones de pesos, equivalentes al 15.5 % del PIB, y gastos por 1.62 billones, un 18.7 % del PIB, lo que implica un déficit fiscal de 280,575.3 millones de pesos, equivalente al 3.2 % del PIB. La inversión pública ascendería a 215,284.7 millones de pesos, superior a la consignada en el presupuesto inicial de 2025.
Tras su aprobación en el Congreso Nacional, la pieza queda ahora pendiente de ser remitida al Poder Ejecutivo para su promulgación.