La medida se implementará dos años después de hacerlo en EEUU y Canadá. Desde 2018 la empresa se ha enfrentado a denuncias sobre uso de componentes cancerígenos en el artículo
La farmacéutica Johnson & Johnson anunció este jueves que en 2023 suspenderá la venta de sus polvos de talco para bebé en todo el mundo, dos años después de hacerlo en EEUU y Canadá acuciada por miles de denuncias sobre la seguridad del producto.
En una breve nota, la empresa dijo que ha tomado la “decisión comercial” de sustituir el talco por almidón de maíz en este producto infantil después de recibir unas 38.000 demandas que vinculan su uso a largo plazo con el desarrollo de cáncer, aunque siguió negando que esa sea la causa.
A finales de 2018 aparecieron informaciones que apuntaban a que J&J sabía desde hacía décadas que sus polvos de talco contenían asbesto, un mineral de composición y caracteres semejantes a los del amianto y con efectos nocivos para la salud.
Desde entonces, J&J se ha enfrentado a miles de demandas en las que se acusa al fabricante de haber contribuido al desarrollo de cáncer de ovario de las consumidoras, un extremo que la empresa rechaza y que cada año le ha llevado a gastar millones de dólares en litigios.
“Nuestra posición sobre la seguridad de nuestro talco cosmético sigue sin cambiar. Defendemos firmemente las décadas de análisis científicos de expertos médicos de todo el mundo que confirman que el polvo de talco para bebé Johnson’s es seguro, no contiene asbesto y no provoca cáncer”, declaró la firma.
La empresa afronta otros problemas judiciales en EEUU y aceptó a principios de este año pagar millones de dólares a varios estados, en conjunto con otros grandes distribuidores de medicamentos, por su responsabilidad en la crisis de los opioides.
La compañía ha sido condenada varias veces, una de ellas en 2018 por un jurado que la condenó a pagar 4.400 millones de dólares a 22 demandantes por daños y perjuicios.
En junio de 2020, un tribunal de apelación de Missouri redujo esta cantidad al considerar que algunos demandantes, al no tener vínculos con el estado, no debían haber sido incluidos en el juicio.
Sin embargo, el tribunal determinó que el grupo había “vendido a sabiendas productos que contenían amianto a los consumidores”, lo que causó “gran angustia física, mental y emocional”.
Johnson & Johnson presentó un recurso ante el Tribunal Supremo de Missouri, que se negó a estudiar el caso, y luego al más alto tribunal del país, que hizo lo mismo este martes.
Previamente, la Corte de Apelaciones de Missouri falló en contra de la solicitud de J&J de anular las indemnizaciones compensatorias y punitivas otorgadas a las demandantes, pero redujo el total a 2.120 millones de dólares de los 4.690 millones que originalmente decidió un jurado.