Santo Domingo, RD.- Negligencia e improvisación por la no Compra de contadores para el desempeño del día a día de las distribuidoras, mas la caída estrepitosa en la inversión en programas y proyectos de reducción de pérdidas, así como la pésima gestión gerencial de las distribuidoras, son las que explican el incremento brutal de las pérdidas de las distribuidoras, que en diciembre del 2021 se situaban en 28% pasando a un 41% en Mayo 2022, según explican expertos.
Un incremento en las pérdidas, ascendente a un 41% en total acumulado de acuerdo con los datos del último informe de desempeño elaborado por el propio Ministerio de Energía y Minas, reitera parte de los problemas que se han criticado en los últimos meses como parte de las dificultades del sector eléctrico, convertido hoy en el talón de Aquiles de la actual gestión gubernamental.
En Mayo 2022, mientras Edenorte y Edesur sus pérdidas totales se sitúan alrededor del 32%-33%, las de Edeeste se colocan en un 57%, lo que significa que de cada 100 pesos pierden 57 pesos.
La energía facturada por las distribuidoras a los clientes, ha venido disminuyendo mes tras mes a partir de Octubre 2021, cuando se situaba 1,042 millones de kilovatios hora (Gwh) y en Mayo, con temperaturas más elevadas, se redujo a 928 Gwh, para una disminución de un 11%
Esa disminución de un 11% en la energía facturada es una consecuencia y reflejo de la falta de contadores, entre otras situaciones graves.
Se estima que alrededor de un millón de usuarios de electricidad, o sea viviendas y negocios que consumen electricidad, no cuentan con medidores instalados, por lo cual dicho consumo no es medido por no contar con contadores.
La instalación de contadores o medidores eléctricos es una responsabilidad total y absoluta de las distribuidoras que, hasta el momento, han dado muestra de incompetencia en esa y otras tareas que puedan eficientizar el sistema y optimizar el uso de los recursos destinados al sistema eléctrico nacional.