Pese a los últimos recursos de sus víctimas, que pedían aplazar el proceso para que pudiese ser juzgado, un cóctel de fármacos por vía intravenosa ha acabado con su vida
Marin Eugen Sabau, conocido también como el ‘pistolero de Tarragona’, ha fallecido hoy al mediodía en el Consorcio Sanitario de Tarrasa (Barcelona) tras practicársele la eutanasia que había solicitado, y que la Justicia finalmente había autorizado, según confirmó su abogado. Un cóctel de fármacos administrado por vía intravenosa ha acabado con la vida del vigilante de seguridad que en diciembre de 2021 quedó tetrapléjico abatido en un enfrentamiento con los Mossos d’Esquadra tras haber asaltado una oficina de la empresa de seguridad privada en la que había trabajado.
Se trata del primer reo al que se le aplica la eutanasia en España, y un caso inédito en Europa, al menos del que se tenga conocimiento, ya que Sabau se encontraba en prisión preventiva a la espera de juicio, acusado de los delitos de tentativa de homicidio, tenencia ilícita de armas y atentado a la autoridad. Pese a los recursos judiciales presentados por las víctimas del Eugen Sabau –resultaron heridos dos vigilantes de la empresa de seguridad y dos agentes de la policía autonómica–, que reclamaban que se paralizase la eutanasia para que el agresor pudiese ser juzgado, distintas instancias judiciales avalaron finalmente el proceso de muerte asistida, apuntando que ante la citada colisión de derechos prevalece la libertad a decidir sobre la propia muerte.
Tras la autorización de la Comisión de Garantías del departamento de Salud de la Generalitat, un juzgado de primera instancia de Tarragona, la Audiencia Provincial posteriormente y finalmente el Tribunal Constitucional no aceptaron las demandas de aplazamiento del proceso presentadas por las defensas. Por último, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) rechazó un último intento por aplazar la muerte asistida. Pese a fracasar en su demanda, el abogado de uno de los mossos herido confirmó que seguirá adelante con su demanda al Estado ante el TEDH al entender que se ha vulnerado su derecho a la tutela judicial efectiva.
El ‘pistolero de Tarragona’ cuyo abogado adelantó que ha escrito una carta que se hará pública tras su muerte, ha estado acompañado por tres de sus familiares, a su lado en sus últimos momentos. El proceso de eutanasia, cuya administración debía prolongarse no más allá de cinco minutos, se ha retrasado a causa de la última voluntad del detenido: ser donante de órganos. Así lo hizo saber su abogado, Gerard Amigó, asegurando que Sabau llevaba una vida sana y no fumaba ni bebía, por lo que sus órganos están en perfectas condiciones.