DOHA.– En un duelo de titanes del fútbol europeo, Francia derrotó por 2-1 a Inglaterra, este sábado en Al Khor, a 50 km al norte de Doha, y se clasificó para las semifinales del Mundial de Catar, donde se enfrentará a la sorprendente Marruecos, que antes venció a Portugal (1-0).
Aurélien Tchouaméni adelantó a los vigentes campeones del mundo con un potente disparo desde fuera del área (17) y empató al inicio del segundo tiempo Harry Kane (54), transformando un penal, con el que igualó el récord de goles de Wayne Rooney en la selección inglesa (53 ambos), pero Olivier Giroud marcó el segundo para los 'Bleus' (78), minutos antes de que el capitán inglés enviara a las nubes otro penal con el que podría haber provocado la prórroga.
Tras los primeros minutos de tanteo, Francia fue la primera selección que buscó el arco contrario, con un par de centros de Ousmane Dembélé desde la derecha que cerca estuvo de aprovechar Giroud, sobre todo el segundo, que llegó a cabecear y atajó Pickford (11).
Seis minutos después llegaría le primer gol, en una jugada en la que el ataque francés basculó de izquierda a derecha, Griezmann pasó la pelota a Tchouameni y el joven centrocampista del Real Madrid se sacó un latigazo de derecha desde fuera del área que se coló pegado a la base del palo de la portería inglesa.
Tras el gol, los dos equipos se liberaron y ganó el fútbol. Luke Shaw, con un golpe franco directo a las manos de Lloris (21) y Harry Kane, en un mano a mano que le sacó su compañero en el Tottenham, pudieron haber empatado para los ingleses (22).
Zapatazo de Tchouaméni
El capitán de los 'Three Lions' lo volvió a intentar con un disparo desde fuera del área que envió Lloris a córner (29) en momentos en que los ingleses buscaban el empate frente a una Francia que descaradamente atrasó sus líneas para tratar de sorprender al rival a la contra.
Mbappé, casi sin intervenir al comienzo del partido por el buen marcaje de Kyle Walker, 'apareció' en el minuto 39 para rematar, demasiado alto, un centro retrasado de Théo Hernández.
El segundo tiempo comenzó con un tremendo disparo de Bellingham desde la frontal que desvió a córner con otra atajada extraordinaria (47) un Lloris que este sábado jugó su partido 143 y se convirtió en el jugador con más internacionalidades de los 'Bleus'.
Inglaterra encontró el premio a su mayor atrevimiento cuando el árbitro brasileño Cesar Sampaio señaló penal por un derribo de Tchouaméni a Bukayo Saka dentro del área y Harry Kane no perdonó desde los once metros (54), igualando a Wayne Rooney como máximo goleador de la historia de la selección inglesa (ambos con 53).
El empate acabó por desatascar el encuentro. Los franceses respondieron al tanto inglés con un disparo de Adrien Rabiot que atajó Pickford (55) y una jugada de Mbappé por la izquierda cuyo centro no encontró rematador, en la primera acción en la que el francés pudo zafarse de la marca de Walker (57), y los de Southgate con dos acciones individuales de Saka y Kane que blocó Lloris (59 y 62).
Argentina y Francia, que se presentaron en el Mundial de Qatar 2022 en el grupo de grandes favoritos, han confirmado su condición, pero les queda un penúltimo paso para cumplir sus anhelos y expectativas, las semifinales, en las que tendrán que sofocar la rebelión protagonizada por Croacia y, principalmente, por Marruecos.
Entre el martes y el miércoles, en los estadios de Lusail y Al Bayt, los dos de mayor aforo de esta primera Copa del Mundo en un país árabe, se conocerán los nombres de los dos equipos que el domingo, de nuevo en Lusail, se jugarán la corona universal.
Argentina y Croacia serán los encargados de abrir el fuego en un duelo de dimensiones hasta románticas. Leo Messi contra Luka Modric. Dos Balones de Oro frente a frente. Representantes, otrora el argentino, de la gran rivalidad Barcelona-Real Madrid.
Dos de los mejores jugadores de los últimos tiempos e incluso de la historia. Han sido protagonistas de algunas de las páginas más brillantes. Casi una treintena de enfrentamientos a todos los niveles. Se reencuentran con un sueño como coronación a dos carreras estelares.
Ambos lucen el ’10′, el destinado a los grandes 'cracks'. Son los líderes indiscutibles de sus respectivos equipos y de su actuación dependerá buena parte del encuentro de Lusail, aunque en el caso de Messi es si cabe más decisivo ante el desenvolvimiento más coral del conjunto ajedrezado.
El cuadro de Lionel Scaloni derrapó de entrada ante Arabia Saudí. Sufrió pero se recompuso al ritmo de las genialidades de Messi y ha ido solventando, no sin problemas, los escollos que ha tenido en el camino con Australia y Países Bajos, encuentro este más que caliente y tenso tras los penaltis, en los que emergió Emiliano Martínez.
También pasó por el mismo sistema Croacia. En su caso, para ser fiel a su costumbre en las últimas grandes competiciones, necesitó la tanda de penas máximas en octavos ante Japón y en cuartos frente a Brasil.
Una competición más, los vigentes subcampeones mundiales, han demostrado una capacidad de resistencia, de no hundirse jamás, envidiable. Bajo la batuta de un Modric eterno y de Zlatko Dalic desde el banquillo, nunca se han rendido. Ante la Canarinha, gran favorita, tuvieron el encuentro perdido en la prórroga. No se descompusieron y evitaron la derrota casi en el último minuto con una contra culminada por Bruno Petkovic.
Dominik Livakovic hizo el resto. Detuvo tres tiros a Japón y el de Rodrygo Goes. El fallo de Marquinhos condenó al adiós precipitado a Brasil y quién sabe si a Neymar, que dejó su futuro en el aire.
Croacia ratificó su carácter competitivo con el que vuelve a estar, por segundo Mundial consecutivo, en la semifinal. En Rusia 2018 dilapidó las ilusiones de Inglaterra. Ahora es la gran amenaza para la Albiceleste.
La revelación reta al campeón
El miércoles será el turno para Francia, la defensora del título, la todopoderosa campeona, y para la gran revelación del torneo y esperanza del fútbol africano y árabe, Marruecos.TE PUEDE INTERESAR