¿Por qué solo Estados Unidos y El Vaticano no tienen aún misiones diplomáticas en RD?

SANTO DOMINGO, RD. – Curiosidad y extrañeza ha causado el hecho de que a pesar de la instalación de una nueva gestión de gobierno hace más de dos años, Estados Unidos y El Vaticano aún no han designado a los máximos representantes de sus misiones diplomáticas ante la República Dominicana.

Desde la aceptación por parte del Papa Francisco de la renuncia del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, y delgobierno norteamericano de Robin Bernstein como embajadora, ambas producidas hace dos años, ambas misiones permanecen acéfalas de sus titulares y son manejadas por funcionarios de niveles inferiores.

Estas ausencias han creado muchas expectativas y conjeturas, especialmente porque Estados Unidos es considerado como el socio comercial más importante de la República Dominicana, y cuyas relaciones entre ambos países iniciaron en 1884 y hasta la fecha se ha mantenido sólida aunque compleja, sobre todo a raíz de las sucesivas crisis haitianas.

Con la Iglesia Católica, la República Dominicana mantiene una sólida relación que remonta desde 1964 cuando Santa Sede Apostólica y la República Dominicana firmaron un concordato, aún vigente en toda su extensión.

Ese solemne documento lo suscribieron el ajusticiado dictador Rafael Leonidas Trujillo y su Santidad el Sumo Pontífice Pío XII Pro.

El principal objetivo de ese acuerdo fue crear una norma para regular” las recíprocas relaciones de las Altas Partes contratantes, en conformidad con la Ley de Dios y la tradición católica de la República Dominicana”.

A principios del 2021 el papa Francisco aceptó la renuncia en sus funciones como arzobispo metropolitano de Santo Domingo del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez.

Según las informaciones López Rodríguez se mantendrá en el cargo hasta que sea posicionado su sucesor, cuyo proceso para el nombramiento se encuentra "adelantado".

López Rodríguez fue nombrado obispo de la diocesis de San Francisco de Macorís (hoy provincia Duarte) por el papa Pablo VI en 1978 ,y tres años después arzobispo metropolitano de Santo Domingo. Diez años después fue ascendido a cardenal por el papa Juan Pablo II, en medio de notables cambios entre sus colaboradores más cercanos.

López Rodríguez presentó su renuncia en 2011 tras cumplir 75 años de edad, sin embargo, su dimisión no había sido acogida hasta el momento por el papa Francisco.

Al dejar el cargo, el cardenal será arzobispo emérito de Santo Domingo, y se mantendrá como miembro del Colegio Cardenalicio de por vida, con derecho a votar en la elección de un nuevo Papa.

A pocos meses de asumir la Presidencia de los Estados Unidos, el presidente Joe Biden propuso al capitolio al diplomático Calvin Smyre como embajador en República Dominicana.

Al momento de anunciarse dicha nominación, Smyre fungía como vicepresidente ejecutivo de Asuntos Corporativos de Synovus (corporación financiera) y presidente de la fundación bajo el mismo nombre.

Oficialmente, por Republica Dominicana han desfilado decenas embajadores estadounidenses, cada uno destacándose por sus estilos diplomáticos, algunas veces cuestionados y hasta rechazados.

De los nominados el que nunca asumió fue Smyre, un político de carrera con casi 50 años ininterrumpidos en el parlamento de Georgia y que en 1975 fue electo miembro de la Cámara de Representantes del mencionado Estado, en ese entonces, destacando como el miembro más joven.

En el año 2020 el entonces presidente Donald Trump propuso como jefa de su legación diplomática en República Dominicana en momentos en que se desempeñaba como presidenta y directora de Richard S. Bernstein and Associates, Inc. y vicepresidenta y directora de Rizbur, Inc., ambas de West Palm Beach, Florida, hasta su renuncia el 29 de junio de 2018.

Sustituyo a James ‘Wally’ Brewster, un defensor de los derechos de los “gay” (homosexuales) y que se acredito junto a su esposo.

Durante su misión como embajadora, Robin Bernstein estuvo acompañada por su esposo, lo que genero causó bastante controversia en el país, a distinción de otras figuras.

Además, se caracterizó por ser un duro crítico del ex presidente Danilo Medina;, llegando a emitir opiniones públicamente sobre corrupción, narcotráfico y orientación de género, afirmando en alguna ocasión que RD era un puente de drogas hacia los Estados Unidos.

Nombrado como uno de los 100 mejores pensadores globales, Brewster hizo historia en territorio dominicano, convirtiéndose en el primer embajador abiertamente gay en servir a EE.UU. en el hemisferio occidental.

Con Hipólito Mejia como presidente Estados Unidos designo como su embajador a Hans Hertell en el 2001 y se mantuvo seis años después con Leonel Fernández como jefe de Estado.
Fue nominado a embajador de los Estados por el presidente George W. Bush, que lo mantuvo en la posición hasta el año 2007.

Antes de asumir sus funciones en República Dominicana laboraba como lobista y
abogado con más de dos décadas de experiencia en gobierno, asuntos públicos y derecho corporativo y bancario. Fue presidente del estado de Puerto Rico de la Asociación Nacional de Jóvenes Republicanos de 1984 a 1985 y miembro del Comité Directivo Nacional de la exitosa campaña presidencial de George Bush en 1988.

Captó la atención de muchos, pues en varias oportunidades opinaba sobre el tema migratorio y tuvo desencuentros por los impuestos en el Tratado de Libre Comercio entre EE.UU, Centroamérica y República Dominicana.

En la misma procesión estuvo Donna Jean Hrinak con Joaquin Balaguer entre 1994 y 1996. Fue nominada por el presidente Bill Clinton y precedida por Robert S. Pastorino, un ítalo americano que fue muy criticado reiteradamente por el cardenal López Rodríguez por sus recurrentes pronunciamientos sobre temas políticos propios y deliberantes de Republica Dominicana.