Santo Domingo RD .- El dalai lama es el jefe espiritual del budismo tibetano y, según creen sus seguidores, es el gurú o maestro que reencarnó de bodhisattva Avalokitesvara, el buda de la compasión.
Al morir cada dalai Lama, los monjes (lamas) del Monasterio Amarillo designan a su siguiente reencarnación en un niño de corta edad, interpretando una serie de signos con respecto a su visión del budismo tibetano. No se trata, por tanto, de una dinastía de monarcas hereditarios sino de la máxima representación personal de un régimen teocrático.
Actualmente, el dalai lama es Tenzin Gyatso. El líder número 14 del Tíbet es un hombre de 86 años que conserva el cargo desde 1940. Nació el 6 de julio de 1935 en Taktser, en el Tíbet oriental. A los dos años fue reconocido por su pueblo como la reencarnación de su predecesor.
El decimocuarto dalai lama huyó junto a miles de compatriotas a la India, a principios de 1959, tras la dura represión china contra el fallido levantamiento popular de Lhasa, capital del Tíbet.
Desde entonces continuó la lucha por la libertad de su pueblo, aunque siempre «oponiéndose sistemáticamente a la violencia», de acuerdo con EFE. Por ese motivo le fue concedido el Nobel de la Paz en 1989.
Su Santidad el XIV Dalái Lama, Tenzin Gyatso, el líder espiritual del Tíbet, se refiere a sí mismo como «un simple monje budista». Nació el 6 de Julio de 1935, en una pequeña aldea situada en Taktser, en Amdo en el noreste del Tíbet, en el seno de una familia de agricultores. A la temprana edad de dos años, el niño que entonces se llamaba Lhamo Dhondup, fue reconocido como la reencarnación del XIII Dalái Lama Thubten Gyatso.
Existe la creencia que los Dalái Lamas son manifestaciones de Avalokiteshvara o Chenrezig, el Bodisatva de la Compasión y el santo patrón del Tíbet. Se cree que los bodisatvas son seres iluminados que han pospuesto su propio nirvana y han elegido renacer para servir a la humanidad.
Educación en el Tíbet
Su Santidad inició sus estudios monásticos a los seis años. Su curriculum consistía en cinco materias mayores y cinco menores. Las materias mayores eran lógica, arte y cultura tibetana, sánscrito, medicina y filosofía budista, ésta última se dividía en cinco categorías: Prajnaparimita —la perfección de la sabiduría—, Madhyamika —la filosofía del camino medio—, Vinaya —el canon de la disciplina monástica—, Abidharma, metafísica, y Pramana —lógica y epistemología—. Las materias menores eran poesía, música y arte dramático, astrología, composición y expresión, y sinónimos.
En 1959, a los 23 años, Su Santidad rindió su examen final en el templo Jokhang de Lhasa, durante el festival anual Monlam (gran plegaria). Superó el examen con honores y se le concedió el grado de Geshe Lharampa, el más alto grado académico, equivalente a un doctorado en filosofía budista
Responsabilidades como líder
En 1950, después de la invasión china del Tíbet, Su Santidad fue emplazado a asumir plena responsabilidad política. En 1954, viajó a Beijing para entablar negociaciones de paz con Mao Zedong y otros dirigentes chinos, incluyendo Deng Xiaoping y Chou Enlai. Sin embargo, en 1959, tras la brutal represión llevada a cabo por el ejército chino tras el alzamiento nacional tibetano, Su Santidad se vio obligado a huir hacia el exilio. Desde entonces vive en Dharamsala en el norte de la India
Desde la invasión china, la Administración Central Tibetana liderada por Su Santidad ha estado apelando a las Naciones Unidas sobre la cuestión del Tibet. La Asamblea General adoptó tres resoluciones sobre el Tíbet en 1959, 1961 y 1965.
Iniciativas de paz
El 21 de septiembre de 1987, en su discurso a los miembros del Congreso de los Estados Unidos en Washington DC, Su Santidad propuso el Plan de Cinco Puntos para la Paz en el Tíbet, como primer paso hacia una solución pacífica a la cada vez más crítica situación en el Tíbet. El plan para la paz propuesto tenía cinco aspectos básicos:
1. Convertir todo el Tíbet en una zona de paz.
2. Cese de la política de transferencia de población china que amenaza la propia existencia del pueblo tibetano.
3. Respeto a los derechos humanos fundamentales del pueblo tibetano y de las libertades democráticas.
4. Restauración y protección del medio ambiente natural del Tibet y cese, por parte de China, del uso del territorio tibetano para la producción de armas nucleares y como vertedero de residuos nucleares.
5. Inicio de negociaciones sinceras sobre la condición futura del Tíbet y de las relaciones entre el pueblo tibetano y el chino.
El 15 de junio de 1988 en su discurso a los miembros del Parlamento Europeo en Estrasburgo, Su Santidad hizo otra propuesta detallada profundizando sobre el último de los cincos puntos del Plan de Paz. Propuso conversaciones entre China y Tíbet con el fin de crear una entidad política democrática de auto-gobierno para las tres provincias del Tíbet. Esta entidad se crearía en colaboración con la República Popular China y el gobierno chino seguiría siendo el responsable de la política exterior y la defensa del Tíbet.
Reconocimiento universal
Su Santidad el Dalái Lama es un hombre de paz. En 1989 se le concedió el Premio Nobel de la Paz por su lucha pacífica para la liberación del Tíbet. Se ha mantenido firme en su postura de no-violencia incluso frente a agresiones extremas. Asimismo, es el primer Premio Nobel reconocido por su preocupación por el problema medioambiental global.
Su Santidad ha viajado a más de 67 países en 6 continentes, en donde ha recibido más de 150 distinciones entre galardones, doctorados honoris causa, premios, etc. en reconocimiento a su mensaje de paz, no-violencia, comprensión entre religiones, responsabilidad universal y compasión. Es también autor y coautor de más de 110 libros.
Su Santidad ha mantenido diálogos con los líderes espirituales de diferentes religiones y ha participado en muchos eventos promoviendo la armonía y entendimiento entre las religiones.
A mediados de 1980, Su Santidad inició diálogos con científicos modernos, principalmente en los campos de la psicología, neurobiología, física cuántica y cosmología. Estos diálogos han resultado en una colaboración histórica entre monjes budistas y renombrados científicos, para tratar de ayudar a las personas a alcanzar paz interior. Asimismo ha llevado a incluir la ciencia moderna como asignatura curricular en las instituciones monásticas tibetanas establecidas en el exilio.
Retiro político
El 14 de marzo de 2011, Su Santidad envió una carta a la Asamblea de Diputados del Pueblo Tibetano (Parlamento Tibetano en el exilio) solicitando traspasar su poder político temporal. Según el Acta Constitutiva de los Tibetanos en el Exilio, Su Santidad seguía siendo técnicamente considerado como el jefe de estado y esta histórica declaración puso fin a la autoridad dual, espiritual y política, del Dalái Lama y retomó la anterior tradición de los primeros cuatro Dalái Lamas, que eran solo líderes espirituales del Tíbet. Así pues, los dirigentes elegidos democráticamente asumirán completamente el liderazgo político del Tibet y la Gaden Phodrang, la institución de los Dalái Lamas, continuará y permanecerá intacta.
El 29 de mayo de 2011, Su Santidad firmó y ratificó formalmente el traspaso de su poder temporal al dirigente elegido democráticamente. Con este acto se dio por finalizada una tradición de 368 años por la cual los Dalái Lamas ostentaban el poder espiritual y temporal del Tíbet.
El futuro
En 1969, Su Santidad ya manifestó claramente que las personas involucradas deberían decidir si querían que en el fututo se continuara con las reencarnaciones del Dalái Lama. Sin embargo, en el caso de que el público deseara la continuación de los Dalái Lamas, al no existir directrices concretas, se corría el riego de que por intereses políticos se hiciera un mal uso del sistema de reencarnación. Por lo tanto, el 24 de septiembre de 2011 se establecieron claramente las directrices para reconocer al próximo Dalái Lama, evitando de este modo cualquier duda o engaño.