EL VATICANO, ITALIA.- Alrededor de 17 mil niños de diversas diócesis participaron el sábado 10 de junio en la peregrinación anual al Santuario de Fátima.
Este año, los pequeños ofrecieron sus oraciones especialmente por la “rápida mejoría del Papa Francisco”.
El Santo Padre fue ingresado en el Hospital Gemelli de Roma el miércoles 7 de junio, donde fue operado de una obstrucción intestinal. Los informes brindados por la Oficina de Prensa de la Santa Sede indican que la recuperación del Papa se viene dando de acuerdo a lo provisto.
El Obispo Castrense de Portugal, Mons. Rui Valério, fue quien lideró la peregrinación bajo el lema “Como María, compartiendo la alegría”.
Durante el evento, el prelado invitó a los niños a mirar a la Virgen María que, “con el corazón abierto, acogió el anuncio del ángel, ‘se levantó y salió de prisa’ al encuentro de su prima Isabel, para llevarle la luz de la verdadera alegría: la presencia de Jesús”.
Para Mons. Valério, “decir que alguien es feliz es lo mismo que decir que esa persona ama y es amada”.
“Si les preguntas a tus padres cuál fue el día más feliz de sus vidas, probablemente te dirán que fue el día en que recibieron la noticia de que su hijo venía en camino, porque un hijo es una bendición y una alegría enorme”. “Luego se lo contaron a todos, porque estaban llenos de amor y alegría”, agregó.
Mons. Valério afirmó que “esto es lo que sintieron los Santos Francisco y Jacinta Marto cuando la Madre del Cielo los visitó y les dijo que Jesús los amaba y que debían ser niños felices. Este es también el mensaje que nos deja hoy: donde hay amor, hay alegría”. Y “cuando la alegría está en nuestros corazones, no queremos guardarla para nosotros; sentimos la necesidad de llevarla a todos los demás”.
Por eso, invitó a los niños a trasmitir esa alegría al mundo entero. “Digámosle a esa gente que piensa que la felicidad es tener tantas cosas que le basta la alegría de ser amado y amar”, destacó.
Mons. Rui Valério también habló sobre la situación en Ucrania, “un país que está en guerra, donde hay gente que hace daño a los demás”. Y pidió a los niños que “traten de hacer llegar su voz a Ucrania”, para que “escuchen nuestro mensaje: ama y serás feliz”.