Puerto Príncipe.- Al menos una persona murió y varias más resultaron heridas este lunes en las protestas que miles de haitianos llevaron a cabo en Puerto Príncipe y otras ciudades del país para exigir la salida del poder del primer ministro, Ariel Henry, antes del 7 de febrero, fecha en la que tradicionalmente se celebran las investiduras presidenciales.
En la población de Les Cayes, en el sur de Haití, con manifestantes enfurecidos en las calles, hubo un muerto y al menos tres heridos, según fuentes locales y redes sociales, en las que puede verse al fallecido.
En Puerto Príncipe, hubo barricadas incendiadas en algunas calles, incluso en la autopista de Delmas, mientras los manifestantes recorrían las calles en contra del Gobierno de Henry, al que consideran incapaz de dirigir el país tras más de 30 meses en el poder luego del asesinato del presidente Jovenel Moise.
En varias partes del área metropolitana de la capital se oyeron disparos, las escuelas no abrieron y el transporte público no funcionó con normalidad. Además, muchos comercios se vieron obligados a cerrar sus puertas.
El ex primer ministro Claude Joseph, del partido Engages pour le Developpement (EDE) y opositor frontal al Gobierno, participó en una protesta que fue dispersada con gases lacrimógenos por la Policía Nacional Haitiana, que no permitió que los manifestantes llegaran a la casa de Henry como era su propósito.
Además de en Puerto Príncipe, hubo protestas en ciudades de provincias como Les Cayes, Gonaïves y Ouanaminthe, que estuvieron completamente paralizadas.
Las manifestaciones se han intensificado recientemente en Haití, en medio de los llamamientos a la revolución del exlíder rebelde haitiano Guy Philippe.
Para la simbólica fecha del 7 de febrero se han anunciado protestas en todo el país, por lo que las escuelas permanecerán cerradas para evitar riesgos.
Haití vive una crítica situación social, política y económica y está inmerso en una violencia cada día mayor a manos de las todopoderosas bandas armadas, que cometen matanzas, secuestros, violaciones y ataques.
Ante esta situación, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó en octubre pasado el envío de una misión multinacional de apoyo a la seguridad, que liderará Kenia y que aún no se ha materializado.