Santo Domingo, RD.- En los dos primeros meses del 2024 el Gobierno central a transferido para el subsidio eléctrico mas de 22 mil millones de pesos, lo que representa el 72.6 por ciento del dinero que el Estado ha especializado para evitar inflación en diversas áreas que afectan directamente a los consumidores.
Si se mantiene esa tendencia, se espera que al final de año serían unos 132 mil millones lo que el Gobierno tendría que transferir al sistema eléctrico para compensar las perdidas que tiene este sector, lo que serían 46 mil millones de pesos mas de los estipulado en el Presupuesto Nacional de este año, que son 86 mil millones.
Los dos primeros meses de este año el subsidio eléctrico ya superó el del primer trimestre de 2023, que fueron 21 mil 331.2 millones de pesos, contra 22 mil 425.1 millones, es decir, mil 93.9 millones más.
El sector eléctrico ha acaparado el 72.6 % de los 30 mil 884.6 millones de pesos que ha transferido el gobierno por concepto de subsidios antiinflacionarios hasta el 1 de marzo del 2024, según el Ministerio Economía, por lo que ya ha superado el 54.5 por ciento que representó en todo el primer trimestre del año pasado.
El subsidio eléctrico sigue erosionando la finanzas del Gobierno al aumentar indetenidamente, a pesar de la disminución drástica del precio del gas natural y carbón mineral, que representan entre el 70 y 75 por ciento de los carburantes utilizados en el país para generar energía.
Con relación al 2022, el carbón mineral y el gas natural han reducido sus precios en más de un 50 por ciento en los mercados internacionales.
En el presente Gobierno las pérdidas eléctricas han aumentado de 34 por ciento en el 2019, a 43 por ciento en el 2023, lo que ha obligado a aumentar el subsidio de 20 mil millones de pesos a 86 millones de pesos en el presupuesto de este año, aunque la proyección es que el subsidio podría absorver en el 2024 unos 132 mil millones de pesos.
El problema de las pérdidas que tiene las Empresas de Distribución Electrica(EDES) no se debe a la falta de cobro, ya que el año pasado se cobró el 95 por ciento de la energía facturada, sino a serias deficiencias administrativas.
El problema se trata de falta de manejo racional de las EDES, deficiencia gerencial, falta de capacidad y planificación, gastos corrientes abultados, empleomanía super numerosa, incapacidad para medir la energía servida a los usuarios por falta de contadores, incumplimiento de la ley General de Electricidad y al desabastecimiento de transformadores, cables, cut-out y otros dispositivos de protección, así como materiales de otras índoles.
Se cree que el deterioro y las pérdidas del sector eléctrico es una acción planificada desde sectores del Gobierno comprometidos con inversionistas privados interesados en convertir el sistema de producción y comercialización de energía en un monopolio.