Santo Domingo, República Dominicana – El Círculo de Mujeres con Discapacidad (CIMUDIS), condenó enérgicamente la agresión sufrida por una niña de 14 años con discapacidad múltiple que no puede caminar, hablar, ni alimentarse por sí misma, víctima de violación por parte de la expareja de su madre y que, debido a la prohibición total del aborto en el país, sea obliga a mantener un embarazo de alto riesgo para su salud y vida.
La organización que agrupa a mujeres con diferentes discapacidades (visual, auditiva, física e intelectual), sostiene que la grave discapacidad de ‘Carina’ le impide valerse por sí misma, y su desarrollo físico, emocional e intelectual hacen que su embarazo represente un peligro real para su vida y bienestar. “Para las mujeres con ciertos tipos de discapacidad, un embarazo complicado puede representar un riesgo para la vida y la salud, en especial, para una niña.
Las condiciones médicas preexistentes, las limitaciones físicas y las barreras de acceso a servicios de salud de calidad hacen que los embarazos de alto riesgo sean especialmente peligrosos para nosotras. Es crucial que tengamos la opción de acceder a un aborto terapéutico cuando nuestras vidas están en peligro o cuando el embarazo es inviable.
La vida y la salud de las niñas y mujeres dominicanas deben ser protegidas de manera efectiva”, declaró Cristina Francisco, directora de CIMUDIS.
La señora Francisco, entiende además que, la falta de protección social, así como la asistencia económica y social insuficiente, han hecho que la vida de ‘Carina’ y su familia, quienes ya viven en condiciones precarias, se vea aún más comprometida ante la responsabilidad de un embarazo complicado.
Para CIMUDIS, este caso ejemplifica la vulnerabilidad y la desprotección en la que se encuentran las mujeres con discapacidad en la República Dominicana.
La prohibición total del aborto agota aún más las opciones de salud y bienestar para estas mujeres y niñas, que ya enfrentan barreras significativas en el acceso a servicios de salud de calidad y protección social.
A pesar de que el país ha firmado diversos tratados internacionales y cuenta con protección especial para las personas con discapacidad en su Constitución, los maltratos, violaciones y abusos siguen siendo frecuentes. Casos como el de ‘Carina’ continuarán ocurriendo a menos que el gobierno nacional tome medidas decisivas.
“Incluir y aprobar las tres causales en el nuevo Código Penal, además de brindar una protección especial a las personas con discapacidad, es necesario para garantizar nuestros derechos en la República Dominicana”, concluyó Francisco.