Bruselas, (EFE).- El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, consideró «inaceptable» la nueva oleada de explosiones en aparatos de comunicación ocurrida este miércoles en el Líbano, y pidió una investigación «independiente» y actuar de forma «urgente» para evitar una escalada militar en toda la región.
«El riesgo de una escalada militar, con consecuencias devastadoras para toda la región, exige una movilización urgente», manifestó Borrell en un comunicado en el que condenó «firmemente» el nuevo ataque perpetrado hoy con la explosión de un gran número de dispositivos electrónicos en todo el Líbano.
Este miércoles, y por segundo día consecutivo, volvieron a registrarse en diferentes puntos del Líbano numerosas explosiones que esta vez afectaron sobre todo a aparatos de radio como ‘walkie-talkies’, a diferencia de los buscapersonas atacados el día anterior.
El número de muertos por la nueva oleada de explosiones asciende a 14 y el de heridos a más de 450, informó el Centro de Operaciones de Emergencia del Ministerio de Salud Pública libanés.
«Una vez más, el método indiscriminado empleado es inaceptable debido a los inevitables y graves daños colaterales que ocasiona entre los civiles y a las consecuencias más amplias para toda la población, incluido el miedo y el terror, y el colapso de los hospitales», dijo el jefe de la diplomacia europea.
Borrell subrayó que «quienquiera que esté detrás de estos ataques pretende sembrar el terror en el Líbano».
Y, por ello, se sumó a la evaluación del incidente del alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, y a su llamamiento para que se lleve a cabo una «investigación independiente».
La nueva oleada de deflagraciones se produjo apenas 24 horas después de que otra originada en miles de buscapersonas en manos de miembros de Hizbulá causara 12 muertos y 2.800 heridos también en regiones controladas por el movimiento, según el último balance oficial.
El ataque del martes fue atribuido a Israel y también causó víctimas civiles, entre ellas dos niños que perdieron la vida. EFE