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El sindicato que representa a 45.000 estibadores en huelga en puertos del este de Estados Unidos y el Golfo de México ha alcanzado un acuerdo para suspender su paro hasta el 15 de enero con el fin de dar tiempo para negociar un nuevo contrato, dice una persona al tanto del asunto.
Los trabajadores afiliados a la Asociación Internacional de Estibadores (ILA) reanudarán sus labores inmediatamente al menos hasta enero, señaló la persona, la cual habló a condición de guardar el anonimato porque el acuerdo aún no se firma.
El trato permitirá que el sindicato y la Alianza Marítima de Estados Unidos, que representa a los puertos y a los transportistas, tengan tiempo para negociar un nuevo contrato colectivo por seis años. La persona también dijo que ambas partes alcanzaron un acuerdo sobre incrementos salariales, pero no había detalles disponibles.
El sindicato se declaró en huelga a primera hora del martes tras expirar su contrato en una disputa sobre salarios y automatización de tareas en los puertos de Maine a Texas. La huelga se produjo en el momento álgido de la temporada de compras navideñas en 36 puertos que manejan cerca de la mitad de la carga de los buques que entran y salen de Estados Unidos.
El riesgo de escasez de productos en las estanterías de las tiendas aumentaba si la huelga duraba más de unas semanas. Pero la mayoría de los minoristas se habían aprovisionado o habían enviado artículos con antelación en previsión del paro.
Los gobernadores de cuatro estados portuarios de la costa este de Estados Unidos afectados por la huelga de estibadores, la primera de este tipo en 47 años, habían instado este jueves a conseguir un “acuerdo justo” que pusiera fin al paro.
Los gobernadores de Nueva York, Kathy Hochul; Nueva Jersey, Phill Murphy; Maryland, Wes Moore, y Massachussetts, Maura Healey, indicaron en una breve nota su preocupación por el asunto y advirtieron contra la especulación de precios por parte de empresas oportunistas.
“Es crítico para USMX (Alianza Marítima de Estados Unidos, la patronal) e ILA (el sindicato International Longshoremen’s Association) alcanzar un acuerdo justo pronto que respete a los trabajadores y garantice el flujo del comercio en nuestros puertos”, dijeron los gobernadores. “Queremos dejar claro que nosotros, junto con la Administración Biden-Harris, estamos monitoreando de cerca los casos de especulación de precios, y advertir a todas las empresas que no deben utilizar este momento como una oportunidad para beneficiarse injustamente de las familias trabajadoras”, agregaron.
“Seguiremos coordinándonos estrechamente para garantizar que los suministros críticos estén disponibles en los centros médicos y supermercados de todo el país”, indicaron también.
El paro afectaba a más del 43 % del comercio marítimo de Estados Unidos y podía costar hasta 5.000 millones de dólares diarios. Los sectores de bienes de consumo, automoción, energía y productos agrícolas podían ser los más afectados si la huelga de estibadores se alargaba.
El presidente de EEUU, Joe Biden, dijo que no tenía previsto recurrir a las provisiones de la Ley Taft-Hartley, que le permite forzar la vuelta al trabajo por 80 días por intereses de seguridad nacional.
