En una nueva etapa de su tumultuosa vida, Daniel Hernández, conocido en el mundo musical como Tekashi 6ix9ine, enfrenta una vez más la justicia estadounidense. Esta vez, el rapero ha sido sentenciado en Nueva York a pasar un mes y medio en prisión, consecuencia de múltiples violaciones a los términos de su libertad supervisada. Durante la audiencia, el juez Paul Engelmayer expresó claramente su descontento con Hernández, al afirmar que su “violación de la confianza del tribunal” era “profunda”. Este evento reciente marca un nuevo capítulo en el historial legal de Tekashi, quien, tras colaborar en casos judiciales en 2020, había logrado una liberación anticipada que le permitió reactivar su carrera musical.
En el centro de esta sentencia están las violaciones a la libertad supervisada que Hernández admitió haber cometido. Entre las transgresiones más destacadas están sus viajes no autorizados a Las Vegas y Sarasota, Florida, sin previa aprobación de las autoridades. Además, Hernández dio positivo en varias pruebas de metanfetaminas y faltó a las pruebas de drogas requeridas en dos ocasiones, lo cual agravó su situación ante el tribunal. Estos incumplimientos fueron interpretados por el juez Engelmayer como una muestra de falta de respeto hacia las normas impuestas y su condición de libertad supervisada.
El historial legal de Daniel Hernández es extenso y estuvo particularmente marcado por su relación con la pandilla Nine Trey Gangsta Bloods. En 2018, Tekashi fue arrestado y enfrentó cargos federales por asociación delictiva y conspiración para cometer asesinato, además de estar vinculado a otros delitos organizados junto a esta pandilla, la cual fue responsable de múltiples actos de violencia en Nueva York, según informaron las autoridades en ese momento. Su vínculo con esta organización criminal terminó por situarlo en el centro de un caso complejo y de gran repercusión pública, en el que Hernández optó por colaborar con la justicia a cambio de beneficios en su sentencia.
En 2020, fruto de su cooperación con las autoridades, Hernández obtuvo una liberación temprana que sorprendió al público y a la opinión pública. Durante su proceso judicial, Tekashi testificó en contra de antiguos compañeros de la pandilla, lo que resultó en condenas para varios de ellos, como Anthony Ellison y Aljermiah Mack, quienes fueron sentenciados por conspiración de crimen organizado.
Este acuerdo judicial redujo considerablemente la sentencia inicial de Hernández, quien, en lugar de enfrentar décadas en prisión, regresó a su vida pública y profesional con la condición de respetar la libertad supervisada. Sin embargo, sus recientes infracciones han dejado claro que, según el tribunal, no cumplió con sus obligaciones.
A pesar de sus problemas legales, la carrera musical de Tekashi 6ix9ine continuó con éxitos en la escena musical global. En 2017, alcanzó la fama con su sencillo “Gummo”, consolidando su posición en la industria. Desde su liberación en 2020, no solo ha mantenido su popularidad, sino que también ha lanzado nuevos proyectos musicales. En junio de 2023, presentó su álbum de reguetón titulado “Leyenda Viva”, seguido por “Blackballed” en diciembre del mismo año, lo cual refleja su capacidad para seguir atrayendo seguidores, incluso en medio de controversias.
Durante la audiencia, el juez Engelmayer subrayó que las repetidas violaciones de Hernández reflejan una actitud de indiferencia hacia las reglas que regulan su libertad. “¿Quizás crees que estas normas no aplican para ti por ser un rapero famoso, Tekashi 6ix9ine?”, cuestionó el juez, destacando la gravedad de las infracciones, de acuerdo con ABC News. Esta afirmación revela la percepción del tribunal de que Hernández podría haberse sentido exento de cumplir con las normativas debido a su condición de celebridad, lo cual finalmente derivó en la sentencia actual, mostrando la firme postura del tribunal en contra de su comportamiento reciente.