
Santiago-El pastor evangélico y activista de la Marcha Verde, Pablo Ureña, quien llevaba cinco días encadenado al Hospital Infantil Doctor Arturo Grullón, para exigir la mejoría de ese centro de salud, sufrió una crisis y tuvo que ser internado de emergencia.
Ureña exige que el hospital infantil sea dotado de un tomógrafo y mejores quirófanos.
Ureña fue internado en la clínica Unión Médica del Norte.
Pablo Ureña fue trasladado de emergencia en una ambulancia, debido que en una revisión médica se determinó que su salud presentaba deterioro progresivo, se informó que tras su llegada sería sometido a una revisión cardiovascular.
Las autoridades no han respondido a sus reclamos para el hospital.