Ciudad del Vaticano, 18 dic (EFE).- El papa Francisco expresó este miércoles su cercanía y pidió ayuda para los habitantes del archipiélago francés de Mayotte, devastado por un ciclón que ha dejado numerosas víctimas y destrozos.
«Expreso mi cercanía a todos los habitantes del archipiélago de Mayotte devastado por un ciclón y les aseguro mis oraciones. Que Dios conceda el descanso a los que han perdido la vida, la ayuda necesaria a los necesitados y el consuelo a las familias damnificadas», dijo durante la audiencia general, en un saludo a los peregrinos francófonos.
Francisco ya había expresado su cercanía a los damnificados durante su visita este domingo a la isla francesa de Córcega.
En una devastada Mayotte, el número de víctimas aumenta muy lentamente, con 21 muertos y 45 heridos graves contabilizados hasta ahora -aunque se teme que los fallecidos puedan ser centenares-, mientras apenas funcionan la electricidad, las comunicaciones terrestres y aéreas e internet.
El presidente francés se trasladó este martes al archipiélago mientras Francia ha enviado 800 efectivos de salvamento y de fuerzas de seguridad del Estado, y ha instaurado un toque de queda, entre las 22:00 y las 04:00 horas, para evitar pillajes en estas islas, que constituyen el departamento más pobre de Francia. EFE
