Beandri Booysen, una estrella sudafricana de TikTok, se convirtió en un símbolo de esperanza y resiliencia para miles de personas. Con apenas 19 años, tuvo una vida marcada por el desafío constante de una enfermedad extremadamente rara conocida como Hutchinson-Gilford Progeria Syndrome (HGPS), o simplemente Progeria. A pesar de su corta existencia, dejó un legado que trascendió fronteras, inspirando a su comunidad de redes sociales y a quienes padecen enfermedades raras.
Se trata de una condición genética extremadamente rara que afecta a aproximadamente uno en 20 millones de personas, según la Progeria Research Foundation. Este trastorno provoca un envejecimiento acelerado en niños, quienes suelen parecer saludables al nacer, pero muestran síntomas como crecimiento lento, pérdida de grasa corporal y cabello, piel envejecida, rigidez en las articulaciones y problemas cardíacos desde sus primeros años de vida. Si bien el desarrollo mental no se ve afectado, la esperanza de vida promedio para quienes padecen esta enfermedad es de apenas 14,5 años, con algunos casos excepcionales de personas que llegan a vivir hasta los 20 años.
Beandri Booysen superó esta expectativa al alcanzar los 19 años, convirtiéndose en la última persona conocida en Sudáfrica con esta condición.
Con más de 278.000 seguidores en TikTok y más de 372.000 “me gusta” acumulados en sus videos, Beandri utilizó su plataforma para compartir su vida y crear conciencia sobre la Progeria y otras necesidades especiales. En sus publicaciones, que incluían lip-syncs, reflexiones personales y mensajes inspiradores, mostró al mundo su actitud positiva frente a los desafíos que enfrentaba diariamente.
Tras su fallecimiento, sus seguidores inundaron las redes sociales con mensajes de tributo. Uno de ellos escribió: “DEP hermosa Beandri, vuela alto con los ángeles,” mientras otro destacó: “Ella era un ejemplo de fuerza y alegría.” Un video en su memoria, publicado tras su muerte, obtuvo más de 300.000 vistas en poco tiempo, demostrando el profundo impacto de su historia.
En octubre, Beandri enfrentó lo que su madre, Bea Booysen, describió como uno de sus mayores desafíos: una cirugía de corazón abierta. Aunque el procedimiento inicialmente fue considerado exitoso, complicaciones posteriores llevaron a la interrupción de su actividad cardíaca, lo que marcó el fin de su valiente lucha el 18 de diciembre. La noticia fue compartida por su madre en la página de Facebook “Beandri, Our Inspiration”, creada hace más de 15 años para documentar su vida.
Bea escribió en una emotiva publicación: “Es con profunda tristeza que anunciamos el fallecimiento de Beandri Booysen, una de las mujeres jóvenes más queridas e inspiradoras de Sudáfrica. A pesar de los desafíos, Beandri irradiaba esperanza y alegría de vivir. Se convirtió en un símbolo de concienciación para la Progeria y otras necesidades especiales”.
Más allá de su presencia en las redes, Beandri fue una figura central en la sensibilización sobre la Progeria. Meses antes de su muerte, destacó la importancia de aceptar la diferencia y encontrar fortaleza en los retos: “He aprendido a lidiar con las dificultades y cirugías. Mi objetivo es crear conciencia sobre las necesidades especiales y mostrar que cada persona es única y valiosa a su manera”.
Su madre también subrayó cómo la crianza jugó un papel fundamental en su fortaleza, explicando que Beandri fue educada como cualquier otro niño, sin ser tratada como diferente. Esta visión, según Bea, ayudó a Beandri a desarrollar una actitud resiliente que inspiró a miles.
El fallecimiento de Beandri no sólo dejó un vacío en su familia, sino que también movilizó a su comunidad y a sus seguidores. Numerosas personas recordaron su capacidad para transformar las adversidades en lecciones de vida. Las condolencias continuaron acumulándose, y su madre anunció que se organizaría un servicio conmemorativo para honrar su vida y su impacto.