Santo Domingo, RD.-. Los restos del capitán pensionado de la Armada, Fabio Montero Verigûete, de su esposa Ofrany Canario y de su hijo Santos Montero Canario serán sepultados la tarde de este martes, después del velatorio en la funeraria Gresefu durante toda la mañana, donde familiares y allegados han expresado manifestaciones de dolor y consternación por la tragedia ocurrida la madrugada de este lunes en el sector Nueva Jerusalén, en Cancino Adentro, en el municipio Santo Domingo Este.
El oficial retirado ultimó a su esposa, a su hijo y su nuera Scarlin Mariel Román, que fue trasladada a la provincia El Seibo, de donde era oriunda, para ser sepultada.
Montero Verigüete, Ofrany Canario y su hijo Santos Montero serán sepultados en el cementerio Cristo Redentor, de la comunidad de San Isidro, a partir de las tres de la tarde.
La tragedia fue cometida por Montero Verigüete en la residencia ubicada en la calle San Juan Bautista, del sector Nueva Jerusalén, cuando las víctimas dormían a las 3:10 de la madrugada de este lunes.
Se ha reportado que el hombre penetró a la vivienda y sin mediar palabras la emprendió a tiros con un arma nueve milímetros.
Entre los familiares y los vecinos hay mucha sorpresa por el incidente, ya que la familia tenia más de 15 años en el lugar y vivían en un “ambiente de paz”, hasta el grado que las cuatro víctimas eran muy “queridas” en el lugar.
El capitán retirado se dedicaba al comercio y su esposa Ofrany Canario era conserje en un liceo con más de 10 años de servicio.
Ignacio Canario, hermano de Ofrany Canario, dijo que los esposos tenían un matrimonio de 40 años y nunca hubo conflictos ni enfrentamientos en ellos.
“Eran personas serias, honesta y trabajadoras; nunca pensé que una tragedia de esta magnitud nos estaría reuniendo a todos en esta funeraria”, dijo Nuris Canario.
Se preguntó, en medio del dolor, que quién se iba a imaginar que Montero Verigüete iba a matar a su propio hijo y su esposa, “dos personas que todos sabemos que eran sanas y que se preocupaban por su bienestar; para que esta tragedia ocurriera no hay motivos”, agregó.
De su lado, Eusebia Montero, hermana del capitán pensionado, pidió que Dios perdona a su pariente.
“Nunca imaginé que mi hermano sería capaz de hacer algo así, porque no lo vi con una conducta violenta y mira cómo como se dejó usar por el diablo, acabando con su familia”, se lamentó la mujer.