Mandalay, Birmania.-. Con una cifra de más de 3 mil fallecidos, este país asiático no ha podido reponerse ni levantarse una semana después de la tragedia provocada por el terremoto de 7.7 grados, que tuvo repercusiones en Tailandia y China, también con muertos y daños en infraestructuras.
Más de 4 mil edificios y más de 400 desaparecidos han quedado como estratos del temblor.
En zonas del centro y norte de este país aún no hay acceso a zonas devastadas. Así lo afirma Mikhael De Souza, coordinador de Médicos Sin Fronteras (MSF).
"Mandalay está muy afectada, e imagino que es incluso peor al norte. En esas zonas es muy difícil tener una idea clara de lo que está ocurriendo", agregó.
Los mayores daños resultaron en las ciudades Mandalay a Sagaing, las principales de Birmania.
El cierre del aeropuerto de Mandalay ha afectado las tareas de rescate y de ayudas humanitarias.
Además de los más de 3 mil 085 fallecidos por el terremoto, "tememos que pueda haber muchas víctimas más", indicó De Souza.
Hay 4,715 heridos y 341 desaparecidos, de acuerdo a datos oficiales.
“Lo que puedo decirte -enfatizó- es que hemos visto mucha destrucción”, indicó el coordinador de Médicos Sin Fronteras.
