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Santo Domingo, RD.- Los propietarios de la discoteca Jet Set, Antonio Espaillat y su hermana Maribel Espaillat, recuperarán su libertad a partir de este viernes, cuando sus abogados esperan concluir los trámites administrativos en cumplimiento de las medidas de coerción que les fueron impuestas por el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional.
El tribunal impuso una fianza de 50 millones de pesos, presentación periódica e impedimento de salida para los dueños del negocio, tras la solicitud de medidas de coerción por parte del Ministerio Público.
Los hermanos Espaillat están acusados de homicidio involuntario debido a la tragedia del Jet Set, que resultó en 236 fallecidos y 180 heridos, a causa del desplome del techo en la madrugada del martes 8 de abril.
Antonio Espaillat y su hermana permanecen en celdas del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva hasta que la barra de la defensa complete este viernes los trámites administrativos, y así puedan retornar a sus hogares.
Debido al feriado de este jueves (por la celebración del Corpus Christi), los abogados de los imputados no cumplieron con los requisitos administrativos, informó el jurista Jorge Luis Polanco.
"Entiendo que ese trámite se completará mañana (viernes)", indicó Polanco al ofrecer declaraciones en el Palacio de Justicia.
De acuerdo con la defensa de los Espaillat, la jueza Fátima Veloz se ajustó a las pruebas presentadas durante la audiencia que concluyó en la madrugada de este jueves, para imponer la medida de coerción del pago de la fianza, presentación periódica e impedimento de salida.
"Basándose en esos dos fundamentos, se decidió que realmente no era necesario estar en un estado de prisión preventiva mientras se agotaba la fase de investigación", precisó Polanco.
Apelación del Ministerio Público
El procurador adjunto Wilson Camacho anunció que el Ministerio Público apelará las medidas de coerción impuestas la madrugada de este jueves a los hermanos Antonio y Maribel Espaillat, imputados de cometer homicidio involuntario y golpes y heridas involuntarias en perjuicio de las 235 personas muertas y las más 180 heridas del desplome del techo de la discoteca Jet Set Club, el pasado 8 de abril.
El titular de la Dirección General de Persecución del Ministerio Público calificó “como una burla a las víctimas” la decisión de la jueza Fátima Veloz, de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional, quien favoreció a los imputados con una garantía económica, presentación periódica e impedimento de salida del país. El caso fue declarado complejo.
“Creemos que el tribunal no ha valorado en su justa dimensión los hechos”, dijo Camacho.
“Creemos que el tribunal no valoró correctamente la magnitud del daño que han traído para la sociedad dominicana los hechos; pero, sobre todo, el daño que significa para 235 personas que murieron, más de 180 personas que resultaron heridas y más de 130 niños que quedaron huérfanos como consecuencia de esta conducta y como consecuencia del comportamiento de Antonio y Maribel Espaillat que pusieron sobre el interés de las personas que ahí estaban, las que acudían normalmente a esa discoteca, su interés económico”, agregó.
