MIU denuncia injerencia de Trump en Latinoamérica bajo pretexto de lucha contra cárteles

Santo Domingo, RD.- El Movimiento de Izquierda Unida (MIU) consideró que, ante el debilitamiento de Estados Unidos en el escenario internacional, especialmente en América Latina, y con un fortalecimiento de China, la administración del presidente Donald Trump pone "su mira injerencista y hegemónica" en países de la región, con el interés de justificar lo que "podría ser una intervención armada bajo el supuesto de librar a estos países de los efectos que producen los cárteles criminales".

La entidad señala que fuentes noticiosas y politólogos de confianza han publicado recientemente que Donald Trump firmó en secreto una orden ejecutiva enviada al Pentágono, la cual permite a las Fuerzas Armadas de Estados Unidos llevar a cabo operaciones militares en territorio extranjero. Esta medida pone especial énfasis en el uso de la fuerza militar contra ciertos cárteles de la droga latinoamericanos, los cuales han sido considerados por la administración de Trump como organizaciones terroristas.

Desde febrero pasado, se sabe que el Departamento de Estado designó al Tren de Aragua y a la Mara Salvatrucha, conocida como la "MS-13″, como organizaciones terroristas extranjeras. Posteriormente, Trump comenzó a hablar del Cártel de los Soles, señalando además que se trata de un cártel venezolano agregado a la lista de grupos terroristas globales.

El MIU indicó que, según la Casa Blanca, "su principal prioridad es proteger a la patria, tras lo cual da el paso de designar a varios cárteles y pandillas como organizaciones terroristas extranjeras".

La organización presidida por Miguel Mejía señala que no hay duda de que la verdadera intención es infiltrarse sigilosamente en las naciones de Latinoamérica con el apoyo de aliados y personas afines; además, preparar el terreno en la región mediante invasiones militares para intentar detener a China, Rusia y los BRICS.

“Nuestra organización condena el narcotráfico y el terrorismo, pero también condenamos la maniobra política del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, al pretender acusar de manera irresponsable de terrorismo y narcotráfico a naciones y a jefes de Estado, como el presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, simplemente porque no se subordinan a su política, amenazando con intervenciones militares”, agregó el MIU.

Dijo que los aliados también se activan visiblemente apoyando la anunciada ofensiva militarista de Trump contra la región, "dejando de lado su verdadera intención hacia naciones soberanas, la cual oculta tras la supuesta persecución a cárteles de la droga. Esos aliados locales expresan una preocupación por la estabilidad en el Gran Caribe y el continente, criticando acciones judiciales llevadas a cabo por naciones que actúan conforme a sus leyes contra quienes las violan, incluidos ex jefes de Estado, como en el caso de la reciente condena al expresidente colombiano Álvaro Uribe, cuyo prontuario delictivo es conocido por todos; y criticando acciones legales de jefes de Estado que actúan en el marco de su diplomacia y de los principios del Derecho Internacional".

"Y no quieren ver la doble moral del presidente estadounidense, quien, mientras lanza una ofensiva militarista contra Latinoamérica y el Caribe, agenda una reunión en Alaska con el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, prevista para el próximo día 15 del mes en curso. No procuramos calificar dicha reunión, pero cabe preguntarnos: ¿A qué juega Trump?", insistió el MIU.