La Casa Blanca inicia despidos masivos tras cierre del Gobierno federal

Washington, D.C. La Casa Blanca confirmó este viernes el inicio de despidos permanentes de empleados federales como parte de una ofensiva estructural impulsada por el presidente Donald Trump durante el actual cierre del Gobierno, vigente desde el pasado 1 de octubre.

La medida marca una ruptura sin precedentes con anteriores cierres gubernamentales, en los que los trabajadores eran suspendidos sin sueldo de forma temporal y posteriormente reincorporados con pagos retroactivos. Esta vez, miles de empleados perderán sus puestos de manera definitiva, en una estrategia que busca reestructurar el aparato estatal y alinear el funcionamiento del Gobierno con las prioridades del Ejecutivo.

“Los RIFs han comenzado”, anunció el director de la Oficina de Administración y Presupuesto, Russell Vought, en un mensaje en la red social X, utilizando el acrónimo de “Reducciones Forzadas de Personal”, que implica despidos oficiales.

Desde agencias clave como Educación, Salud y Medioambiente ya se reportan notificaciones de terminación laboral. Según funcionarios, la intención es eliminar funciones consideradas prescindibles o alejadas de la visión de gobierno del presidente.

Fuentes cercanas a la administración señalan que el plan cuenta con el respaldo del empresario Elon Musk, uno de los principales aliados de Trump durante su segundo mandato.

Reacciones encontradas

La decisión ha generado fuertes críticas por parte de sindicatos federales y legisladores demócratas, quienes acusan al Gobierno de usar el cierre como fachada para ejecutar un “plan encubierto de despidos masivos”.

“Esto no es un recorte presupuestario; es una purga ideológica que desmantela servicios esenciales y golpea a los trabajadores de base”, denunció la senadora Elizabeth Warren.

En contraste, sectores del Partido Republicano alineados con Trump celebraron la medida como un “paso necesario para sanear la burocracia federal”.

Las negociaciones en el Congreso siguen estancadas, sin acuerdos para aprobar un nuevo presupuesto. El Senado volverá a sesionar el próximo martes 14, en un ambiente político cada vez más polarizado.