
Santo Domingo, RD.- Carlos Manzano, titular de la Secretaría de Administración Pública del Partido de la Liberación Dominicana, considera que la transparencia en la gestión pública de la República Dominicana atraviesa un momento crítico, que bien podría calificarse como un estado de emergencia institucional.
La afirmación de Manzano se produce a raíz de los recientes escándalos de corrupción que han sacudido al Estado, particularmente el desfalco millonario detectado en el Seguro Nacional de Salud (SENASA).
“A pesar de los discursos oficiales y de los altos índices de cumplimiento en materia de transparencia administrativa que algunas instituciones exhiben en los informes gubernamentales, la realidad ha demostrado una profunda desconexión entre los indicadores formales y el funcionamiento real del control público”, afirma el experto y miembro del Comité Central del PLD.
El caso del Seguro Nacional de Salud demuestra que los mecanismos de supervisión, fiscalización y rendición de cuentas no solo fallaron, sino que también fueron incapaces de detectar, prevenir o detener un entramado de corrupción que operó durante un largo período de cinco años.
“Este episodio pone en entredicho el papel de los órganos encargados de garantizar la transparencia en las diferentes instituciones públicas del Estado”, señaló.
Opina que la transparencia se ha reducido a un ejercicio meramente burocrático y a un autoengaño por parte de las propias autoridades encargadas de aplicarla.
“La transparencia no puede seguir siendo un eslogan ni un indicador manipulado con fines propagandísticos o para consumo internacional. Debe traducirse en controles efectivos, sanciones ejemplares y persecución penal real, tanto contra los funcionarios corruptos como contra los corruptores privados que se benefician del saqueo del Estado”, comentó.
Carlos Manzano opina que, ante estos hechos, la sociedad dominicana está reclamando una revisión profunda del sistema de control institucional. “Declarar la transparencia en estado de emergencia no es una consigna política; es un llamado urgente a rescatar la credibilidad del Estado y la confianza de la ciudadanía”, afirmó.