EUROPA.- El presidente de China, Xi Jinping, declaró este jueves durante una conversación de más de dos horas con su homólogo estadounidense, Joe Biden, que "los que juegan con fuego se prenderán fuego a sí mismos". La advertencia fue emitida en relación con el tema de Taiwán.
"China está resueltamente en contra de la interferencia en los asuntos de Taiwán y defenderá firmemente su soberanía. Nos oponemos firmemente al separatismo de Taiwán y a la interferencia de fuerzas externas", recordó el mandatario chino y le dijo a su homólogo que debe cumplir con el principio de una sola China.
Por otra parte, Xi advirtió que ver y definir las relaciones chino-estadounidenses desde la perspectiva de la competencia estratégica, considerando a su país como el principal oponente, es un "error de juicio" y una "mala interpretación" de lo que es China.
"La desvinculación y la ruptura de vínculos en contra de la ley no ayudarán a impulsar la economía estadounidense, sino que también harán que la economía mundial sea más vulnerable", agregó y destacó la importancia de promover la cooperación entre ambas partes.
Los dos jefes de Estado también intercambiaron puntos de vista sobre la crisis de Ucrania y consideraron que el llamado fue sincero y profundo, acordando mantenerse en contacto.
Por su parte, Biden remarcó que la política de una sola China de Washington no ha cambiado y no cambiará, y que no apoya la "independencia" de Taipéi. No obstante, cabe recordar que el Gobierno está obligado por la ley estadounidense a proporcionar a la isla los medios para defenderse.
"Se trata de mantener abiertas las líneas de comunicación con el presidente de China, una de las relaciones bilaterales más importantes que tenemos, no solo en esa región, sino en todo el mundo", declaró el portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, antes de concretarse la comunicación telefónica.
La conversación entre ambos líderes se realizó en medio de tensiones en torno a la posible visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, a Taiwán.
Esta semana el portaaviones estadounidense USS Ronald Reagan y su grupo de ataque, que incluye un destructor y un crucero de misiles guiados, zarparon de Singapur este en dirección noreste hacia el mar de la China Meridional, en una ruta que llevaría a la flota a la isla.
En esa misma línea, funcionarios del Ejército del país norteamericano informaron que, de concretarse el viaje de la legisladora, podrían aumentar su presencia militar en la región del Indo-Pacífico.