Nueva York (EFE).- Un grupo de instituciones financieras estadounidenses rescataron este jueves al First Republic Bank con 30.000 millones de dólares, según anunciaron en un comunicado conjunto.
“Bank of America, Citigroup, JPMorgan Chase y Wells Fargo anunciaron hoy que cada uno realizará un depósito no asegurado de 5.000 millones de dólares para First Republic Bank. Goldman Sachs y Morgan Stanley harán cada uno un depósito no asegurado de 2.500 millones de dólares, y BNY Mellon, PNC Bank, State Street, Truist y U.S. Bank hará cada uno un depósito no asegurado de 1.000 millones de dólares”, según el documento.
Tras este anuncio, las acciones de First Republic subían un 11,42 % a las 15.42 hora local (19.42 GMT), un gran contraste con la caída de casi 30 % a primera hora de la mañana.
First Republic tuvo la tercera tasa más alta de depósitos no asegurados entre los bancos de EE.UU., detrás de Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank, según una nota de Raymond James.
First Republic, que tiene sede en San Francisco, fue degradado a la categoría de “junk” (basura, en inglés) el miércoles tanto por Fitch Ratings como por S&P Global.
Con este movimiento se evita que First Republic siga el camino de Silicon Valley Banky y de Signature Bank, entidades cerradas por las autoridades el viernes y el domingo, respectivamente, en un movimiento que desató una corriente de pánico que luego se trasladó a Europa.
El Departamento del Tesoro, la Reserva Federal (Fed) y otras instituciones públicas estadounidenses agradecieron este jueves el rescate del First Republic Bank por un grupo de 11 firmas, que se han comprometido hoy a depositar 30.000 millones de dólares en el banco para evitar su quiebra.
“Esta muestra de apoyo por parte de un grupo de grandes bancos se agradece mucho, y demuestra la resiliencia del sistema bancario”, aseguraron los directores de las oficinas en un comunicado.
Este jueves, la propia secretaria del Tesoro, Janet Yellen, aseguró en una comparecencia ante legisladores que el sector “es sólido” y que los ciudadanos pueden confiar en que sus depósitos están asegurados.