Santo Domingo, RD-Los reportes de apagones frecuentes y por largas horas se intensificaron en distintas zonas del Gran Santo Domingo, cuyos moradores reportaban interrupciones del servicio eléctrico de hasta 10 horas.
El jueves cinco plantas generadoras se encontraban indisponibles en el sistema por gestión de combustible, incluyendo Punta Catalina 1, y tres por causas internas, según el reporte del Organismo Coordinador del SENI.
Este viernes, la unidad 1 de Punta Catalina se encontraba disponible, pero solo aportaba al sistema 80 megavatios de una capacidad instalada de 362 MW.
Desde el pasado martes moradores de sectores como Sabana Pérdida, Pantoja, Los Guaricanos, Gazcue, Marbella II (Las Américas) y otros sectores, dan cuenta de interrupciones del servicio eléctrico de hasta 10 y 12 horas cada día en Sabana Perdida, Villa Mella, Pantoja, Guaricano y otros sectores.
“En Gazcue no iba la luz, pero de unos días para acá se va casi todos los días, y así se han ido intensificado”, respondió el joven Ernesto Chávez, quien vive en la calle Cervantes del sector y quién señala que “con estos apagones se hace insoportable aguantar el calor que está haciendo”.
Julia Rodríguez, que también vive en Gazcue, corroboró lo expuesto por Chávez y agregó que en ocasiones la energía dura mucho para llegar.
La dirigente comunitaria, Xiomara Peralta, también se quejó de la tanda de apagones que se siente en los kilómetros de la autopista Las Américas, en el municipio de Santo Domingo Este.
“Han vuelto los apagones de manera ordinaria. A veces se va durante toda la noche y a veces gran parte de está. También de día se va, aunque con menos frecuencia. Por el día una vez y por la noche a veces dos”, indicó Peralta.
Señaló que esto dificulta que la gente descanse, pero además, que pueda cumplir con sus compromisos académicos, pues las computadoras y los teléfonos móviles se descargan y es imposible cumplir con las tareas.
Gestión de demanda
Cuando llega el verano y sobre todo, en tiempos en que el país se encuentra afectado por Polvo del Sahara, el calor “aprieta” y la demanda de energía eléctrica aumenta, lo que provoca un incremento de los apagones fruto del déficit que arrastran las empresas distribuidoras, lo que obliga a las empresas distribuidoras de electricidad a aplicar lo que llaman “Gestión de Demanda”, que no es más que la planificación de los apagones, tomando en cuenta el total de energía que compran a las generadoras, las pérdidas y la demanda de sus usuarios.