Estados Unidos.-La ex primera dama de Estados Unidos, Rosalynn Carter, la asesora más cercana a Jimmy Carter durante su único mandato como presidente y sus cuatro décadas posteriores como activista, murió a los 96 años.
El Centro Carter informó de su fallecimiento el domingo, tras vivir con demencia y sufrir muchos meses de deterioro de su salud.
Los Carter estuvieron casados más de 77 años, forjando lo que ambos describieron como una “asociación plena”. A diferencia de muchas primeras damas anteriores, Rosalynn participaba en las reuniones del Gabinete, se pronunciaba sobre temas controvertidos y representaba a su marido en los viajes al extranjero. Los ayudantes del presidente Carter a veces se referían a ella -en privado- como “copresidenta”.
“Rosalynn es mi mejor amiga… la extensión perfecta de mí, probablemente la persona más influyente de mi vida”, dijo Jimmy Carter a sus ayudantes durante sus años en la Casa Blanca, entre 1977 y 1981.
Ferozmente leal y compasiva, además de políticamente astuta, Rosalynn Carter se enorgullecía de ser una primera dama activista, y nadie dudaba de su influencia entre bastidores. Cuando se conoció su papel en una muy publicitada remodelación del Gabinete, se vio obligada a declarar públicamente: “Yo no dirijo el gobierno”.
Muchos ayudantes presidenciales insistían en que sus instintos políticos eran mejores que los de su marido: a menudo conseguían su apoyo para un proyecto antes de discutirlo con el presidente. Su férrea voluntad, que contrastaba con su exterior tímido y su suave acento sureño, inspiró a los periodistas de Washington a llamarla “la Magnolia de Acero”.
Ambos Carter dijeron en sus últimos años que Rosalynn siempre había sido la más política de los dos. Tras la aplastante derrota de Jimmy Carter en 1980, fue ella, y no el ex presidente, quien contempló un regreso inverosímil, y años más tarde confesó que echaba de menos su vida en Washington.
Jimmy Carter confiaba tanto en ella que en 1977, a los pocos meses de empezar su mandato, la envió en misión a América Latina para que dijera a los dictadores que hablaba en serio al negar ayuda militar y otras ayudas a los violadores de los derechos humanos.