Ciudad de México, 28 mar (EFE).- Miles de cocodrilos no fueron lanzados al Río Bravo por el Gobierno de EE.UU. para evitar la entrada de migrantes al país, contrario a lo que dicen usuarios de redes sociales que comparten afirmaciones sin sustento e imágenes manipuladas y fuera de contexto.
Publicaciones en TikTok, Facebook, Instagram, YouTube y X aseguran que “8.000 cocodrilos fueron tirados al Río Bravo en el estado de Texas” con el propósito de detener el flujo migratorio al país.
“¡Cuidado! Echaron cocodrilos al Río Bravo para que no pasen los inmigrantes a los EE.UU. Compartan y salven vidas, por favor”, se lee en un mensaje en un grupo de Facebook que difunde un video de TikTok con millones de reproducciones.
A modo de prueba, los internautas comparten imágenes de cocodrilos. Entre ellas, una foto de una fila de caimanes de seis patas junto a hombres vestidos con uniforme militar sobre unas vías del tren.
El mismo contenido circula en español e inglés desde inicios de marzo en varias plataformas.
HECHOS: No es cierto que miles de cocodrilos hayan sido arrojados al Río Bravo para detener a migrantes en tránsito a Estados Unidos, como desmintieron a EFE Verifica las autoridades fronterizas de ese país. Es común avistar caimanes en algunas zonas de Texas, donde son una especie protegida, según información pública del estado. Además, las imágenes virales están descontextualizadas o fueron generadas artificialmente.
La autoridad fronteriza lo niega
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. (CBP, por sus siglas en inglés) confirmó a EFE Verifica que “el Gobierno de los Estados Unidos no ha introducido caimanes o cocodrilos en el Río Grande”.
Un vocero aseguró que el país “sigue comprometido con fomentar una migración ordenada, humana y regular, y con prevenir la pérdida de vidas entre los migrantes que intentan ingresar al país”.
Por otro lado, el portavoz refirió al sitio web del Departamento de Parques y Vida Silvestre de Texas (TPWD, por sus siglas en inglés), donde se explica que el caimán americano o Alligator mississippiensis es una especie protegida en Texas que ha experimentado un notable resurgimiento en las últimas tres décadas, tras estar al borde de la extinción en 1969.
Según el TPWD, estos especímenes son comunes en pantanos, ríos, “bayous” y marismas del sur de Estados Unidos, incluyendo Texas.
Además, prefieren aguas dulces e hibernan de mediados de octubre a principios de marzo, emergiendo en marzo para reproducirse entre el 1 de marzo y el 30 de mayo. Así que es normal que sean vistos en esta época del año en el sur del país.
Por otra parte, las publicaciones virales difunden imágenes que muestran cocodrilos de seis patas, las cuales fueron creadas digitalmente, como revela un análisis de EFE Verifica.
Un examen realizado con la aplicación de inteligencia artificial Iveres (Identificación, Verificación y Respuesta) —un proyecto codirigido por RTVE y la Universidad Autónoma de Barcelona para detectar desinformación e imágenes manipuladas― apunta a que hay más de un 99 % de probabilidad de que la imagen haya sido alterada digitalmente.
En cuanto al resto de las imágenes que se difunden, no hay pruebas de que sean recientes ni de que los animales estén allí para detener el paso de migrantes a EE.UU.
Sumado a ello, una búsqueda por palabras clave en Google no encuentra registros oficiales o de fuentes confiables sobre los supuestos cocodrilos lanzados al Río Bravo.
Aunque parezca una cantidad pequeña, sumada a las de muchas más personas, nos ayuda a mirar hacia donde muchos prefieren no mirar.
Por el contrario, es posible encontrar que la misma narrativa ya se había viralizado en el pasado, en español e inglés, siendo desmentida por verificadores internacionales en 2018 y 2021.
En conclusión, miles de cocodrilos no fueron lanzados al Río Bravo por el Gobierno de Estados Unidos, sino que son habituales en algunas zonas del sur del país, incluyendo Texas, sin relación alguna con el tránsito de personas migrantes.