Los Ángeles, 30 abr (EFE).- Una pareja latina de Los Ángeles fue sentenciada este martes a pasar décadas en la cárcel tras no disputar los cargos de tortura y asesinato de su hijo de 4 años en julio de 2019.
José María Cuatro, de 32 años, fue sentenciado a 32 años de cárcel, y Úrsula Elaine Juárez, de 30, deberá pasar 22 años en prisión por la muerte de su hijo, Noah Cuatro.
Inicialmente la pareja, que residía en Palmdale, al noroeste de Los Ángeles, se había declarado no culpable del deceso del niño de 4 años.
El menor fue hospitalizado de urgencia el 5 de julio de 2019 tras una llamada hecha por sus padres al número de emergencia, en la que señalaron que el niño se ahogaba en la piscina del complejo de apartamentos donde vivían.
El personal del hospital, no obstante, encontró señales de trauma en el menor, que murió la mañana siguiente, lo que motivó el inicio de una investigación del Departamento de Alguaciles del Condado de Los Ángeles (LASD, en inglés) y que les fuera retirada a la pareja la custodia de otros tres hijos.
En la acusación, también se presentaron cargos contra la pareja de tortura al menor durante un periodo de cuatro meses, empezando en abril del año anterior.
Maggie Hernández, tía del menor, dijo este martes en el tribunal que el padre es “un monstruo malvado". "Espero que tú y Úrsula nunca salgan de prisión", añadió, según información citada por FOX 11.
En una declaración escrita, Evangelina Hernández, bisabuela del niño, dijo que Juárez le había dicho en un momento que no le agradaba el niño.
En 2020, Hernández presentó una demanda contra el condado de Los Ángeles alegando que la muerte del pequeño ocurrió después de que ya se habían presentado múltiples informes de abuso al Departamento de Servicios para Niños y Familias (DCFS, en inglés).
En Los Ángeles se han presentado ya varios casos similares de niños muertos por abuso de sus padres o guardianes legales.
También en Palmdale, en mayo de 2013, murió el menor Gabriel Fernández, de 8 años, por abuso y tortura. Su madre, Pearl Sinthia Fernández, fue condenada a cadena perpetua por la muerte del niño, y el novio de la mujer, Isauro Aguirre, enfrenta la pena de muerte por asesinato.
En la ciudad vecina de Lancaster, el 20 de junio de 2018 fue encontrado inconsciente en el apartamento de su madre y el novio de esta Anthony Ávalos, de 10 años, quien murió al día siguiente en el hospital. EFE