El funeral del papa Francisco, fallecido el lunes a los 88 años a causa de un ictus cerebral, se celebrará el próximo sábado 26 de abril en la Plaza de San Pedro. Se anticipa una ceremonia sin precedentes, con la presencia de decenas de jefes de Estado, líderes internacionales y miles de fieles que rendirán homenaje al primer pontífice latinoamericano de la historia.
Desde la noche del lunes, las banderas en todo el mundo ondean a media asta como muestra del luto oficial. En Roma, el ambiente es solemne mientras los restos mortales del papa serán expuestos en la Basílica de San Pedro desde el miércoles, permitiendo a los fieles despedirse personalmente. La misa fúnebre comenzará a las 10:00 (hora local) del sábado y será presidida por el cardenal decano Giovanni Battista Re.
Entre los primeros en confirmar su asistencia figuran la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y la del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, quienes destacaron la humildad y el compromiso del papa con los más vulnerables. También estarán presentes la presidenta de Suiza, Karin Keller-Sutter, y el presidente interino de Rumanía, Ilie Bolojan.
Desde Ucrania, el presidente Volodímir Zelensky confirmó su presencia, recordando las constantes plegarias del pontífice por la paz en su país. Por parte de Estados Unidos, el presidente Donald Trump y la primera dama Melania Trump asistirán al funeral. El mandatario ordenó que las banderas estadounidenses ondeen a media asta hasta el sábado.
El presidente francés, Emmanuel Macron, viajará a Roma, al igual que la primera ministra italiana, Giorgia Meloni. Desde Argentina, país natal del papa, el presidente Javier Milei encabezará la delegación oficial.
España estará representada por los reyes Felipe VI y Letizia, mientras que el Gobierno aún no ha definido su representación institucional. Desde el Reino Unido, el primer ministro Keir Starmer ha confirmado su asistencia, aunque no se ha anunciado la presencia de miembros de la familia real británica.
Portugal ha decretado tres días de luto nacional —del 24 al 26 de abril— y estará representado por el presidente Marcelo Rebelo de Sousa y el primer ministro en funciones, Luís Montenegro. También viajarán a Roma los presidentes de Lituania, Letonia, Hungría y Polonia. El presidente polaco, Andrzej Duda, y su esposa asistirán al funeral, destacando el legado del papa en favor de los refugiados y los valores de misericordia.
Los reyes de Bélgica, Felipe y Matilde, también confirmaron su asistencia, agradeciendo la reciente visita de Francisco a su país en 2024.
Por el contrario, el presidente ruso Vladimir Putin no acudirá. Su portavoz, Dmitry Peskov, informó que el mandatario no viajará a Roma, en parte debido a la orden de arresto internacional emitida por la Corte Penal Internacional.
Con una participación internacional sin precedentes, la despedida del papa Francisco promete convertirse en una de las ceremonias más significativas de la historia moderna del Vaticano. El legado del pontífice argentino —marcado por la humildad, la justicia social y su cercanía a los marginados— quedará grabado para siempre en la memoria colectiva de la Iglesia y del mundo.
Con información de Infobae